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La cuarentena obligatoria es una de las medidas principales para evitar el contagio masivo del coronavirus pero muchas personas arguyen que si no salen a trabajar, no contarán con un plato de comida en su mesa, y esto produce incertidumbre.
No obstante, la solidaridad se hizo presente en varias localidades de nuestra nación, permitiendo a varias personas seguir aguantando durante la cuarentena con kits de alimentos. De este modo, más de 360 voluntarios estuvieron trabajando desde el viernes pasado hasta el lunes, entregando 10.000 bolsas cargadas de víveres a los pobladores más carenciados de Encarnación.
Asimismo, el 25 de marzo, la municipalidad de Ciudad del Este realizó una repartición de 25.000 bolsas de comestibles, compradas con fondos propios, entre familias esteñas afectadas por la escasez. Por otro lado, Fabián Coronel, Diego Ramírez y Javier Prieto comenzaron a armar sus propios kits para ayudar a familias necesitadas de la zona de Isla Pucú; así, los jóvenes también apelaron a la solidaridad de la gente que donó alimentos para la entrega de víveres.
“Para la primera entrega logramos recaudar 54 kits, luego de que se haya viralizado nuestra iniciativa, mucha gente se comunicó con nosotros para colaborar con la causa y así entregamos más de 300 kits en total”, comenta Fabián. El joven remarcó la notable necesidad de estos hogares con muchos hijos, y varias madres solteras.Así también, junto con un grupo de amigos, Jorge Martínez implementó el “delivery solidario”, que consiste en comprar alimentos del súper y, luego de hacer una correcta desinfección, entregar los productos a domicilio con un costo de G. 35.0000. El objetivo de esta iniciativa es invertir el 30% de las ganancias en la compra víveres que serán distribuidos a personas de escasos recursos de Asunción, Lambaré, Fernando de la Mora, Luque y San Lorenzo.
“Algunos deben decidir si quedarse en su casa para protegerse del coronavirus o salir a las calles para no morir de hambre. Por este motivo, entre amigos, decidimos solidarizarnos con la gente más afectada por la pandemia”, expresó Martínez. De este modo, la empatía se convirtió en la protagonista principal a la hora de ayudar al más necesitado pues, aparte del inminente contagio, el hambre es una temida amenaza a la que estos corazones solidarios han decidido derrotar.
Por Macarena Duarte (18 años)