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El lavado de manos es fundamental, no sólo para preservar la higiene personal, sino también como método para prevenir muchas enfermedades causadas por microorganismos. Además, se puede evitar la propagación de diversas patologías con el sencillo hábito de la limpieza.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se debe iniciar el proceso de lavado mojando las manos con agua, luego hay que aplicar jabón y posteriormente restregar las palmas entre sí con movimientos circulares. De la misma manera, es necesario frotar el dorso de la mano izquierda con la palma de la derecha, entrelazando los dedos, y viceversa.
Seguidamente, se tiene que fregar ambas palmas de la mano con los dedos entrelazados, frotar el dorso de los dedos de una mano con la palma del lado opuesto, agarrándose los dedos y luego asear los pulgares con movimientos de rotación. Posteriormente, se restriegan las puntas de los dedos contra la palma de la mano de forma circular y, por último, se procede a enjuagar y secar las manos con una toalla desechable, la cual debe ser utilizada para cerrar la canilla.
El proceso completo de lavado de manos, según la OMS, debe durar entre 40 a 60 segundos, por lo que el tiempo estimado de aseo sería equivalente a cantar dos veces la canción “qué los cumplas feliz”.
Otro método medianamente efectivo para la desinfección de las manos es la utilización de productos derivados del alcohol. Sin embargo, según el Ministerio de Salud, el alcohol no es un limpiador eficiente cuando se tienen las manos visiblemente sucias, por lo que es importante lavarlas con agua y jabón.
Al momento de la desinfección con alcohol, se debe poner en las manos la cantidad necesaria de producto para cubrir toda la superficie, luego hay que frotar las palmas entre sí de manera circular, restregar la palma del lado derecho con el dorso del izquierdo y viceversa. Además, es imprescindible fregar las palmas con los dedos entrelazados.
Seguidamente, se procede a restregar el dorso de los dedos de una mano con la palma de la otra, con movimientos laterales. Igualmente, es necesario fregar en círculos los pulgares para luego, con movimientos rotatorios, frotar las puntas de los dedos de la mano derecha con la palma izquierda y viceversa, finalizando con el secado.
El proceso de desinfección con alcohol, según la OMS, debe durar entre 20 a 30 segundos, por lo que podrías realizar el procedimiento cantando dos veces el coro de “La Macarena” o una vez el estribillo de “Barbie Girl” de la banda noruegodanesa Aqua.
Un aspecto fundamental que no se debe olvidar es la limpieza y desinfección de las superficies con las que estamos en contacto, ya sean picaportes, escritorios, pasamanos, entre otros. El Ministerio de Salud menciona que el celular es uno de los mayores focos de microorganismos, teniendo en cuenta el uso frecuente de los aparatos, por ello es importante recordar su limpieza.
Para limpiar las superficies del celular, se puede recurrir a un paño de microfibra y alcohol. Mientras que para los protectores, sí es que son de plástico, se pueden lavar con agua y detergente de cubiertos o jabón de tocador.
Así como el sabio Pimpón se cuida de las enfermedades lavándose la carita con agua y con jabón, es conveniente que lo imites, en especial con las manos para evitar adquirir o propagar alguna patología. Por ello, es importante recordar que, como dicen las abuelas, “el aseo y la limpieza dan salud y belleza”.
Por Anahí Acevedo (19 años)