En los medios de comunicación, sin embargo, es muy frecuente verla escrita con sus iniciales en mayúscula, como en las siguientes frases: “El salto de Aniol Serrasolses por una cascada de 20 metros en el Círculo Polar Ártico”, “La ausencia de luz solar se prolonga más de 24 horas en el Círculo Polar Ártico” o “La ciudad natal de Papá Noel está situada en el Círculo Polar Ártico”.
Según la “Ortografía de la lengua española”, los nombres de los puntos y de las líneas imaginarias, y de las divisiones, tanto de la esfera terrestre como celeste, son nombres comunes de referente único y se escriben con minúscula inicial: “ecuador”, “paralelo 38”, “círculo polar ártico”, “hemisferio norte”, etc.
De este modo, lo adecuado en los ejemplos anteriores habría sido optar por la minúscula: “El salto de Aniol Serrasolses por una cascada de 20 metros en el círculo polar ártico”, “La ausencia de luz solar se prolonga más de 24 horas en el círculo polar ártico” y “La ciudad natal de Papá Noel está situada en el círculo polar ártico”.
Cuestión distinta es cuando se designa a las regiones geográficas que circundan dichos puntos, caso este en el que pasan a ser topónimos, nombres propios de lugar, como sucede con la denominación “el Ártico”, área alrededor del polo norte, o “la Antártida”, del polo sur, que se escriben con mayúscula inicial.
La FundéuRAE (www.fundeu.es), promovida por la Agencia EFE y la Real Academia Española (RAE), tiene como principal objetivo el buen uso del español en los medios de comunicación.