En los noticias sobre tecnología se pueden encontrar ejemplos como los siguientes: “China ha completado las primeras pruebas de su Hyperloop”, “Este hiperloop alemán promete velocidades de 482 km/h” o “Será el primer prototipo de ‘hyperloop’ de mercancías del mundo”.
Aunque esta denominación era originalmente una marca, hoy se usa de modo genérico para un medio de transporte en el que un vehículo con sustentación electromagnética se desplaza por un tubo al que se le ha extraído la mayor parte del aire, lo que permite alcanzar, al menos en teoría, velocidades de unos 1.200 kilómetros por hora o más.
Por analogía con las naves espaciales, donde se emplea “cápsula” para la sección en la que se instalan los tripulantes, se puede encontrar ya con cierta frecuencia la expresión “cápsula supersónica”, que transmite la idea básica de este tipo de vehículo.
Técnicamente, “supersónico” se refiere a lo que adquiere una velocidad que supera a la que tiene el sonido en el aire, pero en este contexto, por extensión y figuradamente, alude a la que es mucho más alta de lo habitual. Alternativamente, pueden emplearse voces como “ultrarrápido”, que evitan esta imprecisión.
Por consiguiente, en los ejemplos anteriores se podría haber escrito mejor “China ha completado las primeras pruebas de su cápsula supersónica”, “Esta cápsula ultrarrápida alemana promete velocidades de 482 km/h” y “Será el primer prototipo de cápsula supersónica de mercancías del mundo”.
No obstante, si se optara por la voz inglesa, lo apropiado es que vaya en cursiva (o entre comillas, cuando no se dispone de este tipo de letra) y en minúscula, es decir, “hyperloop”, a menos que se trate de la marca, en cuyo caso le corresponde la mayúscula inicial y la letra redonda.
La FundéuRAE (www.fundeu.es), promovida por la Agencia EFE y la Real Academia Española (RAE), tiene como principal objetivo el buen uso del español en los medios de comunicación.