Protegernos de los transtornos respiratorios

Se inició el invierno y con el llegan días de frío, lluvias y humedad, factores que contribuyen a contraer enfermedades respiratorias. Resfríos, gripes, asma, bronquitis, laringitis, rinitis, sinusitis, neumonías e influenzas, son cuadros que aparecen en éstas épocas del año. Más que nunca tendremos que tomar las medidas preventivas para no agravar la situación actual.

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De a poco la gente se está vacunando, lo que es positivo pero no suficiente. Es el sistema de defensas lo que hay que reforzar en estos momentos y para ello veremos que nos recomiendan los especialistas de estas afecciones y otras cosas que podemos hacer en casa.

¿Qué es el sistema inmunológico? Es una compleja red de células, órganos y tejidos del cuerpo que actúan como defensas contra virus, bacterias, hongos y otros patógenos que nos atacan. Los más conocidos son los glóbulos blancos (lifoncitos, fagocitos, macrófagos y otros) pero también la piel y las mucosas cumplen funciones de barreras impidiendo el ingreso de los virus.

Las glándulas del timo, la médula ósea, el bazo y ganglios linfáticos, trabajan arduamente para este proceso biológico de detectar y luchar contra los invasores. Nuestras defensas son los soldaditos guerreros que pelean hasta vencer a los patógenos.

Dice Otto Wagburt, Nóbel 1931: “En un cuerpo ligeramente alcalino no ingresan patógenos y en un organismo acidificado si prosperan estos elementos”. Para saber eso se recurre a un análisis de orina que detecta el PH (potencial hidrógeno) de la sangre; si el resultado es debajo de 5, es muy ácido mientras que 7.5 es lo ideal o sea ligeramente alcalino. Toda la clave de la salud está en el PH.

Además de considerar ese factor, tenemos muchas formas de cuidarnos. Comer más cantidad de frutas y verduras y menos comida chatarra. Las Universidades de México y Otawa (Canadá) realizaron hace años los efectos nocivos del azúcar, la harina, el arroz y la sal en la salud, sobre todo los daños que ocasionan al sistema inmune. Tampoco se recomienda la comida chatarra y menos el tabaco que tanto perjudica a los pulmones. Hacer ejercicios físicos, yoga, meditación, caminatas, contacto con la naturaleza y baños de sol para absorber vitamina D. Alejarse del stress y evitar la angustia, el miedo y la ansiedad también ayudan. Igualmente los protocolos de cuidados e higiene que ya conocemos. Son algunas reglas y hay que cumplirlas para no llegar a complicaciones graves.

blila.gayoso@hotmail.com

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