Las ciudades son organismos complejos, y si bien puede ser fácil reconocer una ciudad de primera categoría con solo verla, cuesta bastante determinar qué es lo que la hace extraordinaria. Por eso, la novena edición del índice IESE Cities in Motion 2024 analizó 183 ciudades, entre ellas, 85 capitales de 92 países, para determinar cuáles son los elementos e indicadores que las posicionan por encima de las demás urbes en la región y el mundo.

Este ranking global, elaborado por el Centro de Globalización y Estrategia de la Universidad de Navarra, evalúa las ciudades más inteligentes del planeta basándose en criterios como la sostenibilidad, conectividad, economía, gobernanza, capital humano, cohesión social y tecnología. Este año, en América Latina, Santiago de Chile se posicionó como la ciudad más destacada, ubicándose en el puesto 91 a nivel mundial. Le siguen Buenos Aires (115), Montevideo (119), Ciudad de México (120) y Panamá (127).

Cabe mencionar que el índice analiza los avances en infraestructura tecnológica y desarrollo social en estas ciudades, aunque también subraya desafíos como industrias más sostenibles y la calidad de los servicios públicos. Globalmente, ciudades como Londres, Nueva York y París lideran la clasificación de este año. Para América Latina, este tipo de ranking sirve como referencia para contrastar, visualizar y mejorar políticas públicas, además de fomentar la competitividad en el contexto global.

Las ciudades más inteligentes de América Latina

El concepto de ciudades inteligentes ha ganado protagonismo en las agendas gubernamentales y empresariales en los últimos años. En Latinoamérica, el desarrollo de este tipo de urbes enfrenta retos significativos como la desigualdad social, la infraestructura limitada y los desafíos medioambientales. Sin embargo, también presenta oportunidades únicas para el crecimiento económico y la atracción de inversiones. Al respecto, este ranking ofrece una perspectiva clara sobre qué ciudades lideran este movimiento en la región y cuáles son sus principales logros y áreas de destaque en la actualidad.

Liderazgo regional: Santiago de Chile

En la edición 2024 del índice, Santiago de Chile se posiciona en primer lugar como la ciudad más inteligente de América Latina, ocupando el puesto global 91. Este reconocimiento se debe a sus avances en áreas clave como gobernanza, tecnología y cohesión social. Santiago ha implementado sistemas de transporte público eficientes, como el metro y los buses eléctricos, además de desarrollar iniciativas de gobierno electrónico que facilitan el acceso de los ciudadanos a servicios esenciales.

Según los expertos, el atractivo de Santiago también radica en su capacidad para atraer talento internacional y promover un ecosistema emprendedor robusto. Las políticas públicas orientadas a la sostenibilidad también han sido fundamentales en su éxito, destacándose programas de reciclaje y energías renovables. El índice indexado, que se actualiza constantemente, muestra que la capital de Chile va escalando posiciones dentro de la lista regional.

Complementan el podio

Buenos Aires (puesto 115): la capital argentina ocupa el segundo lugar del Top después de Santiago, y se distingue por su dinamismo cultural y educativo, siendo un polo de atracción para estudiantes de toda la región. En términos de conectividad y movilidad, la ciudad ha avanzado con proyectos como el metrobús y la ampliación de ciclovías.

Montevideo (puesto 119): la capital uruguaya se destaca por su estabilidad política y social, así como por su enfoque en energías renovables. Es una de las pocas ciudades de la región que ha alcanzado una matriz eléctrica casi 100% sostenible, lo que la posiciona como un modelo en sustentabilidad.

Ciudad de México (puesto 120): su tamaño y complejidad presentan enormes retos, pero también le permiten ser un centro de innovación tecnológica y económica. Las inversiones en infraestructura y digitalización han sido claves para mejorar servicios como el transporte público y la seguridad.

Panamá (puesto 127): el Top 5 se completa con la ciudad de Panamá, que se destaca principalmente en sus indicadores de gobernanza, capital humano y avances tecnológicos, siendo una de las urbes con mayor desarrollo en los últimos años. No obstante, su economía y posicionamiento como marca país todavía forman parte de sus grandes desafíos.

Claves para el éxito

Según el IESE, las ciudades mejor posicionadas en el índice comparten varios factores en común, lo que permite diferenciarlas y observar sus avances:

Gobernanza eficiente: la transparencia y la participación ciudadana son pilares para generar confianza y promover el desarrollo. Este es el principal factor diferenciador entre las urbes avanzadas y las que todavía se encuentran en vías de desarrollo.

Infraestructura tecnológica: la implementación de soluciones digitales, como plataformas de gobierno electrónico y sistemas de transporte inteligente, marca una diferencia significativa, más aún en la actualidad donde la disrupción de tecnologías de punta impacta de manera transversal dentro de muchas industrias.

Sostenibilidad: proyectos que integran energías renovables y reducen la huella de carbono son esenciales para atraer inversión y garantizar calidad de vida. En la actualidad, un número creciente de inversionistas busca iniciativas que compensen el impacto ambiental, como los créditos verdes.

Capital humano: la educación y la capacidad para retener talento son factores clave en la competitividad de estas ciudades. La permanencia o declive dentro del ranking se define muchas veces a raíz de la fortaleza de este indicador.

Desafíos pendientes

De igual manera, y pese a los avances, las ciudades latinoamericanas aún enfrentan importantes retos, de acuerdo con lo señalado por el IESE:

1. Desigualdad social: aunque las iniciativas tecnológicas y de infraestructura mejoran la calidad de vida, muchas veces no benefician a todos los sectores de la población.
2. Financiamiento: las inversiones necesarias para transformar ciudades en verdaderos centros inteligentes suelen ser altas y dependen, en muchos casos, de asociaciones público-privadas.
3. Resiliencia climática: la región es particularmente vulnerable al cambio climático, lo que exige soluciones innovadoras y sostenibles. Paraguay, propiamente, es el claro ejemplo de la vulnerabilidad en este indicador, con dos años de sequía que impactaron enormemente al campo y a la macroeconomía.

Implicaciones para el sector empresarial

Para los líderes de negocios, entender el desarrollo de ciudades inteligentes en América Latina es crucial. Estas urbes representan mercados emergentes con potencial para inversiones en tecnología, infraestructura y servicios. Además, los proyectos relacionados con sostenibilidad y digitalización ofrecen oportunidades para establecer alianzas estratégicas.

Paraguay ocupa en la actualidad el puesto 165 dentro del índice indexado, destacándose en indicadores como macroeconomía, tecnología y un buen perfil internacional, lo que refleja el resultado del trabajo por la marca país por parte de la Red de Inversiones y Exportaciones (Rediex), perteneciente al Ministerio de Industria y Comercio (MIC).

Asimismo, las ciudades inteligentes también fomentan un entorno favorable para startups y empresas de tecnología, creando ecosistemas que promueven la innovación y el emprendimiento. Este panorama ofrece a las empresas la posibilidad de contribuir al desarrollo urbano mientras generan valor económico.

El ranking IESE Cities in Motion 2024 reafirma que América Latina está dando pasos firmes hacia la construcción de ciudades inteligentes, pese a sus complejidades y retos. Santiago de Chile, Buenos Aires, Ciudad de México y Montevideo son ejemplos de cómo las políticas adecuadas pueden transformar las urbes en centros de innovación y sostenibilidad. Para el sector empresarial, estas ciudades no solo representan un modelo a seguir, sino también un campo lleno de oportunidades.