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Mariano Figueredo relató esta mañana que un grupo de agentes de la Patrulla Caminera lo atacó a golpes al negarse a entregar las llaves de su vehículo tras caer alcoholizado en una barrera de control.
El ciudadano reconoció su infracción, pero en ningún momento se negó a colaborar, según garantizó. Ya que no contaba con dinero para el pago de la multa -poco más de G. 700.000- llamó a algunos amigos para completar el monto, mientras esperaba a un costado de la ruta. Se negó a entregar las llaves del rodado, alegando que se la daría solo al fiscal interviniente.
Según se aprecia en las imágenes, uno de los agentes se le acerca a hablarle; por sus movimientos, aparentemente, vuelve a reprochar al aumotovilista, que permanece sentado en una grada esperando por alguien que lo busque. Posteriormente, otro agente con actitud más calma lo saluda con un apretón de manos para iniciar un diálogo, ínterin llegan otros dos uniformados. La charla prosigue hasta que llega a la escena un tercer agente y se suma a las negociaciones, pero la reunión se disuelve cuando dos transeúntes pasan por la zona.
Poco después regresan cuatro agentes junto al afectado, que permanece inmóvil en la grada, y momentos después la conversación se ve interrumpida cuando uno de los uniformados aparentemente intenta meter la mano en uno de los bolsillos del automovilista, lo que generó su reacción y fue tomado del brazo y golpeado por los agentes de tránsito en plena vía pública.
El vehículo finalmente fue llevado al corralón, donde permanece desde abril pasado. El afectado denunció el caso ante la Fiscalía de Derechos Humanos, pero hasta hoy ninguno de los agentes involucrados se acercó a declarar.