Cargando...
El curioso caso comenzó el pasado 8 de febrero cuando el director del Hospital de San Juan Bautista, Dr. Nicodemus Rodríguez, denunció ante la Fiscalía a los padres de dos menores, que se oponían a que sus hijos sean vacunos, alegando que producían en los niños efectos secundarios.
Tras llegar el caso a la justicia, la madre y el padre de los menores fueron citados a declarar. La mujer (cuyo nombre obviaremos por protección a la identidad de los menores) alegó que no se opone a la vacunación de sus hijos, toda vez que exista una garantía de que las vacunas no produzcan otros malestares en ellos. Relató que en una ocasión se aplicó en uno de ellos una inyección, que le produjo inmediatamente problemas de salud.
Ante estas declaraciones, se ordena a trabajadores del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) ir hasta la vivienda de los menores y vacunarlos. Esto estaba previsto para el 16 de febrero, sin embargo, una vez en la vivienda de los niños, nuevamente los padres se opusieron a la inmunización.
El Dr. Nicodemus Rodríguez informó de ello a la Fiscalía, por lo cual fueron citados, otra vez, los padres de los menores. Esta vez estos argumentaron que no vacunarán a sus hijos hasta tener una prueba científica de que sus hijos no saldrán afectados. Resaltó que como padres velan por la salud de sus hijos.
Finalmente, la justicia resolvió que los menores sean vacunados, haciendo valer el derechos de los niños en recibir cobertura sanitaria por parte del Estado.