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Los devotos de la Virgen de los Milagros desafiaron las condiciones climáticas adversas y con pilotines y bajo paraguas se reunieron en torno a la Basílica de Caacupé, donde puntualmente a las 06:00 se dio inicio a la misa central en honor a la patrona de los católicos en Paraguay.
La multitud esperó desde la madrugada el inicio de lo que constituye el punto cúlmine de las celebraciones en honor a la Inmaculada Concepción, más conocida como la Virgen de Caacupé. El cardenal Luis Héctor Villalba, arzobispo emérito de Tucumán, preside los actos ante los miles de fieles, algunos de los cuales peregrinaron varios kilómetros para cumplir las promesas hechas a la la madre común de la comunidad católica local.
Entre las autoridades presentes figuran el vicepresidente de la República, Juan Afara; el ministro del Interior, Tadeo Rojas; el fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón, además del comandante de la Policía, Críspulo Sotelo. Por su parte, el presidente de la República, Horacio Cartes, no asistió esta vez a la misa central, ya que se encuentra de visita oficial en Francia.
Durante el inicio de su homilía, el cardenal Villalba, enviado por el papa Francisco, hizo uso del guaraní y transmitió los saludos del Sumo Pontífice. “Agueru peëme maitei rory ha jehovasa oguerukáva peëme Papa Francisco (les traigo saludos y bendiciones del papa Francisco)”, expresó ante la congregación.
Posteriormente, el líder religioso recordó que la ocasión igualmente es propicia para recordar los 50 años de existencia de la diócesis de Caacupé, creada por el beato Pablo VI el 29 de marzo de 1966.