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Evelin Vergara, de 19 años, vive en Villa Elisa y cuenta a ABC Color que fue a rendir los exámenes. Se comunicó con la Unidad de Becas de Itaipú para saber qué trámites hacer, teniendo en cuenta que para postulantes indígenas o con discapacidad se aplican otros criterios de selección. Le respondieron que con una constancia médica y una nota dirigida al encargado de las Unidad de Becas ya bastaría.
Consiguió los dos documentos y los presentó. En la oficina preguntó a las funcionarios que los recibieron si con eso bastaba, y le respondieron que sí. Días después llamó, y le contaron que solo tenía que esperar que los trabajadores sociales visiten su casa para la evaluación socioeconómica, otra parte del proceso de selección.
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Pero las semanas pasaban y nadie aparecía. El pasado jueves pasado28 de febrero llamó a la Unidad de Becas para avisar, y allí le comunican que no encontraron sus documentos. Vuelve a hacerlo al día siguiente, el 1 de marzo, y le contestan que la constancia médica no es suficiente y que se necesita otro documento: un certificado de la Secretaria Nacional por los Derechos Humanos de las Personas con Discapacidad (Senadis).
Además, le indicaron que solo tiene tiempo de presentarlo hasta el 10 de marzo, y en la Senadis informaron que la expedición demora de tres a cuatro semanas. No le alcanzará el tiempo, y Evelin lamenta que haya perdido un mes porque desde un principio los funcionarios de la Unidad de Becas no le informaron correctamente.
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Contó que su familia es de escasos recursos y, además, teniendo un tipo de discapacidad, sentía que era una gran oportunidad para salir adelante. Sin embargo, está a punto de perder la beca.
Hizo hincapié en que desde un inicio consultó qué documentos necesitaba llevar, y como le dijeron que con la constancia ya bastaba, no empezó con el trámite del certificado, porque gestionarlo iba a implicar un gasto extra para su familia, teniendo en cuenta los traslados y los otros gastos que implica.
La fibromialgia es una enfermedad que se caracteriza por dolor musculoesquelético generalizado. Casi la mitad de quienes la padecen presentan discapacidad. Ese es el caso de Evelin Vergara, quien nos relata que tiene problemas de memoria y limitaciones físicas debido a los intensos dolores.
Canalizamos la consulta sobre el caso de la joven a través del Departamento de Prensa de Itaipú y respondieron tras la publicación de esta nota.
En la Unidad de Becas de Itaipú informaron que inicialmente la joven no declaró poseer alguna discapacidad. En las pruebas de competencias básicas alcanzó 22 puntos, y al no llegar al mínimo de 24 requeridos, no ingresó a la etapa de evaluación socioeconómica.
Como no llegó al puntaje, la segunda opción fue tratar su caso como de discapacidad, pero aún no cuenta con el certificado de la Senadis, explicaron.