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La fila de automóviles y buses en esa zona era de más de cuatro kilómetros. El embotellamiento fue más notorio en el microcentro de Paraguarí.
El caos vehicular inició a las 16:00 y a medida que pasan las horas seguía empeorando. El área de embotellamiento se concentra entre en kilómetro 61 (inmediaciones de la Frutería Paraguarí) y 65 de la ruta I.
En esta zona se encuentra la ruta que proviene de Villarrica, además de los arroyos y balnearios, sitios de donde salía una gran cantidad de rodados en horas de la tarde.
El problema del tránsito se repite como todos los años en estas fechas, principalmente porque un gran grupo sale de la Capital para recibir el Año Nuevo con sus parientes y familiares en las ciudades del interior del país.