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Miguel Meza vive desde hace cinco años con un corazón trasplantado, luego de haber esperado durante 98 días conectado a un corazón artificial, en el Hospital Garrahan de Argentina, comentó su madre, Nancy Meza.
Esa historia parece repetirse en Paraguay con Jesús Ariel Leiva, quien ha sido conectado al corazón artificial hace unos días a la espera de un donante. Por esa razón, la familia de Miguelito fue hasta el hospital para tratar de alentarlos mediante su testimonio.
Nancy recordó lo que pasaron para que Miguelito pudiera acceder a un corazón en Argentina. “En el momento en que no podía más, se procedió a hacer los trámites para instalarle la máquina”, relató en contacto con la 780 AM.
Estuvo más de tres meses conectado al dispositivo de asistencia cardíaca, esperando un donante. En ese tiempo, fue mejorando a tal punto de caminar, pero siempre conectado a la máquina y dentro del hospital.
Un corazón de un donate argentino hoy late dentro del cuerpo de Miguelito, que lleva una vida normal, gracias al trasplante. “Cada vez su organismo se adapta mejor al órgano, él venció muchísimas batallas”, resaltó su madre.
“Ese corazón de la personita que le donó a Miguel está en el cielo, pero su corazón sigue viviendo”, reflexionó.
Instó a todas las personas que tengan la posibilidad de donar algún órgano, que lo hagan, ya que mediante ese acto de valentía y amor se salvan vidas.
Se comprometió a seguir acompañando junto con Miguelito a Jesús Ariel, el primer paciente con corazón artificial en Paraguay. El niño padece una miocarditis dilatada, por lo que urge un trasplante para que siga viviendo.