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“Siento de corazón lo que pasó”, dijo visiblemente afligido Ledezma Ortiz esta mañana tras el juicio oral y público que enfrenta por la muerte de la menor, quien recibió una bala perdida en la Navidad del año 2012, informó Perla Silguero, periodista de ABC Color.
De forma contradictoria, el taxista dijo que admitió haber sido el responsable del disparo “para agilizar la tarea investigativa, pero dijo estar confiado en que se hará justicia. Sin embargo, a continuación dijo que “no tenía intención de matar ni nada”.
Admitió que porta un revólver calibre 38 desde el año 2000 y que lo utiliza por seguridad, pues a veces realiza recorridos nocturnos en el taxi, y aclaró que nada sabe de armas, para luego complementar: “No sé qué locura era lo que me entró. Le pido perdón a la ciudadanía y a todos”.
Durante el juicio, el abogado defensor de Ledezma, Leonardo Garófalo, pidió la realización de una nueva pericia balística y también la nulidad de la imputación y exclusión de varias pruebas que incriminan a su cliente.
La bala que acabó con la vida de Paz Valentina habría recorrido 1.575 metros, desde la terraza del detenido hasta el patio de la vivienda de la pequeña, conforme a la primera pericia realizada.