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Al pisar la vereda de la Municipalidad de Fernando de la Mora, uno ya es recibido por gestores que ofrecen sus servicios para todo tipo de trámites.
Don “Papi” Velázquez es quien nos dio la bienvenida, con tono amable. Como evidentemente está acostumbrado a tratar con personas que tienen usualmente apuro para realizar los trámites, rápidamente entra en confianza. Cuando le dijimos que necesitamos un registro de conducir para una persona que no está en el lugar y que vive en España, apareció el primer planteo del gestor.
“Por G. 800.000 te vamos a conseguir uno legal”. En ese momento, don “Papi” ya recurrió a chistes, con el propósito de generar un ambiente de mayor acercamiento. No perdió la oportunidad de contar anécdotas de cómo en otras ocasiones consiguió registros para otras personas y aseguró que nunca tuvo problemas, ya que posee contactos en Opaci (Organización Paraguaya de Cooperación Intermunicipal), precisamente para evitar contratiempos.
Una vez más tuvimos que entrar en el regateo, debido al excesivo primer precio que lanzó el gestor. Entre risas y chistes, al final, el intermediario ofreció la opción de gestionar un registro “mau”. Esta posibilidad apareció después de que se le informara que el interesado en el documento es albañil, no sabe manejar, tiene problemas de vista y solo puede operar una carretilla.
Luego de una carcajada, don “Papi” hizo su segunda oferta: “Traé G. 300.000 y vení mañana a retirar...”.
Sin embargo, el gestor aclaró que el documento no iba a salir de la Municipalidad de Fernando de la Mora, sino de San Antonio o de Guarambaré.
No obstante, tras la aclaración, el gestor garantizó que el registro sería computarizado y de buen nivel. Sin embargo, cuando tuvimos el carnet en nuestras manos, nos percatamos de que presenta toda la apariencia de un documento falso. Los datos de Juan Carlos Lezcano fueron completados a máquina de escribir.
En lo que realmente cumplió el gestor fue en entregar en tiempo récord el documento. En apenas dos horas ya estaba en nuestras manos. La negociación con este intermediario se hizo dentro del predio de la Comuna, pero la entrega se realizó afuera, en una de las esquinas.
Al entregar el documento, Velázquez aseguró en tono cómplice: “Le dije a mi contacto que era para un pariente el registro y que ese pariente es albañil, que vive en España y que solo carretilla sabe manejar”.
Una carcajada y un apretón de manos sellaron el trato. Como en otros casos, el gestor anunció que estaba a disposición para más trabajos conjuntos.
Toda esta red de falsificadores de registros opera dentro de la misma Municipalidad de Fernando de la Mora. Los gestores negocian con sus clientes a la vista de todos, pero nadie dice nada. Es tan asumida la presencia de los intermediarios que ellos tienen un carnet que aparentemente les fue expedido por el municipio, con sus datos personales.
El registro de Guarambaré que conseguimos en Fernando de la Mora presenta un formato muy antiguo. Autoridades de la Comuna informaron a ABC Color que la licencia que obtuvimos no se usa desde hace siete años.
De hecho, el documento falso tiene todos los datos del interesado al frente y detrás una leyenda. El actual tiene los datos a ambos lados.
Autoridades de Guarambaré, por otro lado, señalaron a ABC Color que no es la primera vez que en Fernando de la Mora se procesan estos documentos que supuestamente salen a nombre de Guarambaré.
“Tienen que investigar bien ahí”, dijo al ser entrevistado el jefe comunal de esa ciudad, Óscar Cabrera. Afirmó que varias veces se denunció ante la Fiscalía este procedimiento. También dijo que este nuevo caso investigado por ABC Color igualmente será puesto a consideración del Ministerio Público.