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“Nos quedamos sin fuente de trabajo”, lamentó el intendente de Tacuatí, Orlando de Vaca, al hacer alusión al cierre de dos aserraderos en el distrito, uno de ellos perteneciente a la familia del asesinado Luis Linsdtron, presuntamente a manos del EPP.
Comentó que esta realidad, por la cual atraviesan varios pobladores de la comunidad, obliga a la gente a recurrir a “changas”, especialmente en colonias menonitas para poder mantener a sus familias.
“Hay algunos que dejan sus familias y se van hacia el Chaco para buscar trabajo y pagar así las cuentas que tienen con financieras o cuentas de lotas que asumieron cuando teníamos fuente de trabajo en Tacuatí”, explicó el jefe comunal en comunicación con radio Ñandutí.
En ese sentido pidió al gobierno centrar su atención en los pobladores de San Pedro.
“El gobierno hasta ahora no asistió a los productores. Sin fuentes de trabajo y ocho familias para mantener a diario por ejemplo es mucho para nosotros”, aseguró.
En otro momento, el intendente no quiso manifestar si es suficiente o no aún el trabajo policial militar en la zona norte del país, luego del último ataque del grupo delincuencial a una comitiva de Derechos Humanos del Ministerio del Interior, oportunidad en que falleciera un suboficial de la policía.
Lo que si expresó fue su repudio hacia sectores armados como el EPP que ahora no solo persiguen a ricos, sino también a pobres.
“No sabemos de dónde provienen estas cosas. Antes eran a los ricos, ahora se le persigue a los pobres, y entonces este gobierno tiene que pensar inteligentemente sobre esto”, resaltó el intendente.