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El problema con el suministro del vital líquido que está teniendo la Junta de Saneamiento obedece a que, como consecuencia de la baja tensión de energía eléctrica, se quemaron los motores de los dos pozos de donde se surte de agua potable la ciudadanía, manifestó el presidente de la Junta de Saneamiento, César Torres.
Las autoridades de la aguatera local decidieron mandar a reparar el motor, tablero y bombas de agua que se quemaron con la baja tensión, lo que representó un costo de G. 8.000.000, y a pesar de la reparación, no pueden poner en funcionamiento porque la extensión del servicio eléctrico es obsoleta y la baja tensión no da la potencia necesaria para que funcione el motor, manifestó Torres.
Dijo que ya conversó con las autoridades de la Ande Regional Paraguarí y tampoco le están dando una solución para poder habilitar uno de los pozos hasta tanto se repare el motor del segundo tanque.
El obsoleto servicio ya perjudicó en estos días a varias familias, no solo con el corte de suministro de agua, sino porque se quemaron electrodomésticos por la baja tensión que es una constante que soportan los lugareños en especial cuando hay fuertes vientos.