Seam debe informar sobre “desastre ecológico”

Luego de que tomara estado público la denuncia de los pobladores de Villa Oliva, Ñeembucú, acerca del supuesto “desastre ecológico” que causan las fumigaciones de las arroceras, los diputados pidieron informe a la Seam al respecto.

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2074

Cargando...

En la sesión ordinaria de hoy en la Cámara de Diputados, a propuesta del liberal Víctor Ríos, se aprobó un pedido de informe a la Secretaría del Ambiente (Seam). Solicitarán información sobre los agroquímicos que utilizan los arroceros en la zona. Deben cumplir con este pedido en un plazo no mayor a 15 días. “Hay un intenso cultivo mecanizado de arroz (…) Desde el principio generó suspicacia y temor entre los pobladores. Esta es una zona frágil para el medio ambiente”, comentó el proponente.

Los pobladores de Villa Oliva denunciaron ayer la ocurrencia de un desastre ecológico en los humedales del norte del departamento de Ñeembucú. Dicen que ejemplares de especies que están en peligro de extinción, como los ciervos de los pantanos y otros animales de ese ecosistema, aparecen muertos tras el rociado que realizan los aviones contratados por los arroceros recientemente instalados en la zona.

Los denunciantes indicaron que a través de una manifestación tratarán de llamar la atención de las autoridades nacionales y de toda la sociedad sobre el peligro que las fumigaciones representan para el frágil ecosistema del estero. Según el concejal del PLRA Antoliano Aquino, las canalizaciones de las aguas de los humedales, así como la acción de topadoras y el uso de productos químicos en fumigaciones aéreas, están causando estragos en la zona. Refiere también que, lamentablemente, el intendente de Villa Oliva, Joel Agüero, y el gobernador Carlos Silva dan la espalda al llamado de auxilio de los vecinos del lugar.

Los responsables de la arrocera del lugar son el brasileño Mario Bergollo y el paraguayo Ignacio Heisecke. Este último había asegurado que la arrocera cuida todos los detalles para evitar que la naturaleza sea afectada y que las críticas están lejos de corresponder a la realidad. Por su parte, la Seam había dado luz verde al emprendimiento, aprobación que también fue otorgada por la Municipalidad de Villa Oliva y la Gobernación de Ñeembucú, instituciones que aún no se han manifestado por la muerte de los animales silvestres.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...