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Cristian Patiño, abogado de la joven de 18 años, comentó que buscarán que esta sea desvinculada de la causa, ya que alegan que no solo no tenía conocimiento del crimen, pese a haber participado de una fiesta en la “casa del horror”, sino que cuando la Policía dio con ella, esta colaboró citando a Bruno Javier Marabel Ramírez, el supuesto autor confeso del crimen, para que fuese detenido por las fuerzas del orden.
Igualmente negó una supuesta relación amorosa entre el presunto asesino y la joven."Ella me dice que sí estuvo. El fin de semana estuvieron en compañía de varias personas que ni cuenta se dieron de lo que ocurrió ahí. Ella era compañera de trabajo del señor, son amigos", comentó sobre el relacionamiento de su cliente con el principal sospechoso del crimen.
El abogado destacó que pusieron a disposición para el peritaje el teléfono de la mujer de modo a demostrar que no tuvo conocimiento del crimen. "Ella colaboró con que se le agarre al señor, de hecho desde su celular ella le escribe al señor, le cita en un lugar y ahí con los policías se constituyen para agarrarle. Alba estaba en sede de la Policía, le cita al señor en la calle Eusebio Ayala y calle Última y una vez que el señor se va ahí, ve que los policías están y ahí va con el taxista, pero ella en ningún momento intentó escapar con él", comentó el abogado.
No obstante, cree que por la gravedad de las acusaciones, la Fiscalía podría pedir la prisión preventiva de todos si es que tienen elementos de sospecha. Sobre la relación con los otros detenidos, dijo que su cliente conocía a Araceli Sosa, que es su compañera de trabajo, detenida junto a su hermano Gabriel Sosa, ya que ambos también participaron el sábado pasado de una fiesta en la vivienda donde ocurrió el crimen.
Por su parte, Aidée Carolina Díaz, madre de los hermanos detenidos María Araceli y Marcelo Gabriel Sosa Díaz, aseguró que sus hijos no están involucrados en el quíntuple crimen.
Al ser consultada sobre si sus hijos estuvieron en la fiesta del sábado, donde fueron hallados los cuerpos, respondió que no sabía. “Mi hija trabaja hasta las dos, las tres de la mañana porque a veces tiene que cubrir eventos. Ellos trabajan todo el día, ¿En qué momento van a hacer eso?”, expresó.
“Los dos trabajan en el centro. Ellos mismos se fueron voluntariamente (a presentarse ante la Policía Nacional) porque yo como mamá siempre les digo que tienen que decir la verdad”, agregó.
María Araceli era compañera de trabajo del presunto homicida, Bruno Javier Marabel (19), según los datos que se manejan.