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Sertrán estaba ultimando con la Municipalidad los detalles para instalar el sistema de control del tránsito por medio de las “fotomultas”, pero, debido a la resolución de la Corte que señala como ilegal el servicio sobre rutas nacionales, ahora estudian en qué calles internas van a instalar los equipos.
La Sala Constitucional de la Corte Suprema confirmó el miércoles la ilegalidad de las fotomultas sobre rutas nacionales en los municipios de Ñemby, Ypacaraí, Coronel Oviedo y Hernandarias, a través de la empresa privada Sertrán.
La comuna, atendiendo a esta nueva situación, por el momento paraliza la colocación de los equipos de Sertrán con quien firmó recientemente contrato.
Según la resolución de adjudicación que data de febrero, la empresa proyecta recaudar G. 1.000 millones, de los cuales 20% quedarán en la Municipalidad, es decir, G. 200 millones.
La licitación y posterior adjudicación fue realizada a pedido del concejal colorado Nelson Peralta, para que la comuna pueda implementar diferentes medidas tendientes “brindar seguridad y ordenamiento en el tránsito dentro del ejido urbano de la ciudad”.
Sin embargo, llamaron, adjudicaron y contrataron a Sertrán sin saber a ciencia cierta dónde van a colocar los aparatos. Consultado el mentor del proyecto, concejal Nelson Peralta, señaló que a raíz de la resolución de la Corte va a analizar jurídicamente que se entiende por ruta nacional antes de dar la venia a la firma para que coloque los aparatos.
Señaló que en principio estaban analizando instalarlos en la intersección de la avenida del Agrónomo y Luis María Argaña, Saturio Rios y 14 de mayo, Mcal. López y la calle Cáceres, y en Manuel Ortiz Guerero y Campo Jordán.
La comuna tampoco hizo un estudio previo para determinar cuales son las calles que merecen mayor control con este tipo de equipos.
Consultado si las “fotomultas” ayudarán a mejorar el tránsito y el ordenamiento vial, dijo que también están trabajando con la Policía Caminera para mejorar ambos aspectos.
Sobre la veracidad de los datos de las fotomultas, dijo que los equipos tienen aprobación del Instituto Nacional de Tecnología y Normalización que dijo también es la encargada del control del funcionamiento respectivo.
“Siempre nos acusan que el fin es recaudar a favor de una empresa privada, pero te invito a que te instales en un semáforo 10 minutos para que cuentes cuantos vehículos pasan la luz roja y cuanto peligro representan”, dijo.
Agregó que en Río de Janeiro (Brasil) y en otras ciudades del mundo se aplica este sistema ya que cuando el automovilista sabe que va a ser multado respeta los semáforos.