Vázquez, director de la radio local “Sin Fronteras”, fue asesinado camino de una discoteca de la que también era propietario en Pedro Juan Caballero, capital del departamento de Amambay, fronterizo con Brasil.
El periodista fue interceptado por varios hombres que circulaban en una motocicleta y disparado varias veces con un revólver de 38 milímetros.
“Lo más probable es que la mafia se encuentre tras este asesinato, pues la forma de operar tiene claramente la marca del crimen organizado. La investigación anunciada debe arrojar resultados rápidamente y debe explorar el móvil profesional”, señaló RSF en su comunicado.
La organización no gubernamental (ONG) explicó que ese departamento es zona de cultivo de marihuana y uno de los principales puntos de entrada para el tráfico de drogas “duras” con destino a países del Cono Sur, y añadió que los periodistas que trabajan allí enfrentan “una amenaza permanente”.
RSF pidió además que, “sobre todo”, los investigadores no cedan a “eventuales trabas o presiones en una región donde, por desgracia, los cárteles ejercen una gran influencia sobre las autoridades locales”.
La ONG indicó que la emisora que dirigía Vázquez se dedica principalmente a la difusión de música, pero también transmite programas de opinión y de información que no evaden ningún asunto, “una audacia”, según RSF, por la que el periodista ha acabado pagando.