Represores argentinos estarían ocultos en Paraguay

Jorge Antonio Olivera y Gustavo De Marchi, exmilitares condenados a 25 años de prisión por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura argentina, estarían ocultos en nuestro país, tras fugarse el mes de julio.

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El exmayor Olivera y el ex teniente primero De Marchi se fugaron el pasado 25 de julio del Hospital Militar Central "Cosme Argerich", donde se encontraban internados.

Según la publicación del portal Misionesoline.net, los investigadores manejan la hipótesis de que los fugados “llegaron hasta la frontera escondidos en algún automóvil para evitar la Gendarmería y, una vez que arribaron, pueden haber cruzado en un bote alquilado desde Paraguay”.

Asimismo, atribuyen el operativo de escape de represores condenados a “un grupo vinculado a militares en actividad o retirados que planeó y financió la fuga”, y que "viviría en forma parcial o permanente en Paraguay".

El informe señala que los investigadores rechazan la teoría de una posible “complicidad política” de los funcionarios de nuestro país en la fuga y aclararon que solicitarán la cooperación paraguaya para intensificar el rastrillaje en nuestro territorio.

Tras confirmarse la fuga, la justicia argentina emitió una orden de captura internacional y ofreció una recompensa de dos millones de pesos para cualquier persona que aporte datos para la localización de Olivera y De Marchi.

Olivera, que era jefe de inteligencia, estuvo involucrado en el secuestro y la desaparición de la modelo franco-argentina Marie Anne Erize Tiseau, en octubre de 1976.

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