Se trata de Darío Colmán Cuevas, de 54 años, quien tiene antecedentes por homicidio doloso y lesión grave y, de acuerdo con lo que él mismo manifestó, una condena de nueve años de prisión. Colmán Cuevas, quien se encuentra detenido en la Brigada N° 1, indicó que normalmente trabaja en la huerta del penal y que por allí sale y entra de la cárcel, sin que los policías se enteren.

El recluso fue detenido pasadas las 17:30 aproximadamente en una cancha de vóley en Emboscada por efectivos de la Brigada que manejaba datos de que algunos condenados -entre ellos Colmán Cuevas- gozaban de “beneficios” para salir y entrar en la cárcel a su antojo, apañados presuntamente por guardiacárceles, según las investigaciones.

Agentes de la Brigada manejaban la información de que tres o cuatro reclusos salen a hacer compras de comestibles en almacenes cercanos al penal y que serían algunos de los que introducen estupefacientes en el lugar, informó el periodista de ABC Color Víctor Ruiz.

Además, siempre de acuerdo con datos de inteligencia de la Policía, estos reos se hacen amigos de los vecinos de la zona, asistían incluso a fiestas de cumpleaños, todo con el fin de conocer a personas con importantes ingresos económicos y obtener sus números telefónicos, para posteriormente realizar llamadas extorsivas desde la prisión.