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Como se había previsto, el Senado trató sobre tablas, luego de una propuesta de la senadora Desirée Masi (PDP), el proyecto aprobado por Diputados la semana pasada y que generó un rotundo rechazo de la ciudadanía. Legisladores de la Cámara Alta finalmente “dieron por muerta” esta iniciativa de la ampliación presupuestaria para los funcionarios del Congreso.
El presidente del Senado, Roberto Acevedo, ya había adelantado la semana pasada que él votaría en contra de este proyecto y fue secundado por sus colegas. Ahora, el documento volverá a Diputados, donde también se decidió su rechazo y, por consiguiente, su paso al archivo.
La senadora Desirée Masi (PDP) salió a favor de las bonificaciones para los funcionarios del Ministerio de Salud. El legislador Jorge Oviedo Matto (Unace) indicó a su turno que muchos, incluidos los médicos, se merecen las bonificaciones. “Podemos ahorrar US$ 80 millones en comida, seguros médicos, seguros al viajero. Eso es en otras institucionales, acá no hay eso. Pero eso, el morbo, es con nosotros nomás. Vamos a recortar el tema de los viajes y viáticos también”, manifestó.
La senadora Esperanza Martínez reprochó las normas de lo que se llama “matriz salarial” por beneficiar a personas que no tienen ni responsabilidad ni trabajo dentro del ámbito de la salud. Abogó por un mejor sueldo para el personal de blanco.
La aprobación del triple aguinaldo, una segunda bonificación para los funcionarios de Diputados, se aprobó el pasado 28 de setiembre y motivó una contundente reacción ciudadana en las redes sociales y una manifestación frente a la sede legislativa.
El rotundo rechazo hizo retroceder a varios diputados, que al día siguiente ya dijeron estar arrepentidos. Ante la situación creada, el Poder Ejecutivo resolvió suspender por decreto el pago de gratificaciones en todas las instituciones del Estado. El presidente Cartes también pidió a los Poderes Legislativo y Judicial que suspendan las bonificaciones dentro del Presupuesto General de Gastos de 2017.