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El caso fue dado a conocer este jueves por ABC Color y consiste en que la mayoría de los concejales de Mariano Roque Alonso votó ayer, miércoles, para sacar la condición de club de campo de la Urbanización Surubi’i. Ahora, el pedido debe pasar por la intendencia.
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Lo que ocurrió supuestamente fue que uno de los socios de esta urbanización, el arquitecto Juan María Fadul Niella, decidió hacer allí un proyecto de urbanización de inclusión social regalando terrenos a personas de diferentes extracciones con la asistencia de una organización no gubernamental.
En ese contexto, benefició a concejales de Mariano Roque Alonso, a un periodista deportivo y hasta a Emilio Camacho, ternado a la Corte Suprema, con la generosa donación de terrenos, lo que constituiría un caso de presunto soborno, ya que los ediles, al menos, votaron para facilitar la concesión de los predios.
Miguel Caffarena, presidente de la Asociación de Propietarios de la Urbanización Surubi’i, conversó este jueves con ABC Cardinal y manifestó que, de las siete hectáreas que tiene la urbanización, la mitad fue “donada” a estas personas, entre las que están los concejales.
“Él (Fadul) no nos dio detalles. Él agarra tres hectáreas y media de las siete que tiene el predio y le dona a 33 personas. De esas 33 personas, 11 son concejales municipales. A pedido del concejal Walberto Zárate se deroga la resolución que nos declara club de campo”, lamentó Caffarena, quien añadió que tomarán medidas jurídicas al respecto. Sostuvo además que Fadul es uno de los socios de la urbanización, pero que está en mora con el pago de sus responsabilidades.
Caffarena explicó además que están catalogados como un club de campo desde 2010 a raíz de una decisión tanto de la Junta como la Intendencia de Mariano Roque Alonso. “Supuestamente, con ayuda de ONG y de otros entes, él (Fadul) está viendo una forma de armar un barrio cerrado como experimento social en donde estarían conviviendo personas de diferentes tipos, clases”, explicó.
El directivo lamenta que podrían perder todo lo invertido dentro del club de campo como las calles, murallas, los pórticos y el sistema de seguridad. “Eso puede sacársenos de un golpe y un plumazo (...) No sé hasta dónde va a repercutir esto”, dijo.
Finalmente, expresó que el grupo de directivos de la urbanización está asesorado “por un buen grupo de abogados. Nosotros nos vemos perjudicados. Es una cuestión escandalosa (...) Esto genera una inseguridad jurídica”, concluyó.