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Las quemazones se realizan generalmente para renovar pastizales. Sin embargo, si no se realiza de manera controlada pueden destruir el ecosistema, incluyendo toda la biodiversidad existente.
“La Seam no recomienda utilizar la quema como método de limpieza, por el peligro a que se descontrolen”(sic), dijo la encargada a ABC Color. Explicó que la quema no está prohibida pero está regulada por la Ley 4014 de prevención y control de incendios.
Al problema de daño al ecosistema se suma la generación de humo que contamina el aire y emite gases de invernadero. El humo afecta a las comunidades aledañas y las rutas. “El material creado por la quemazón, la ceniza, produce un daño a la salud”, explicó Rivas.
La quema de pastizales es una práctica rápida y económica para limpiar los terrenos de malezas “pero a la larga perjudica al terreno mismo, afectando la microfauna y la biodiversidad que pueda tener ese suelo” agregó la encargada.
La legislación mencionada establece normas para prevenir y controlar incendios rurales forestales de vegetación. Esto incluye la quema de pastizales, bosques, matorrales, barbechos, campos naturales, leguminosas, aserrín o cualquier otro cereal o material inflamable.
La encargada explicó que existen ciertos parámetros para realizar una quema controlada, que incluyen los vientos, el tipo de terreno, y las condiciones del tiempo. Además, como es el municipio encargado de aplicar la legislación, la policía y el Ministerio Público deben estar notificados de la acción.
La Secretaría del Ambiente iniciará una campaña de concienciación este miércoles, en el local de la Cooperativa San Cristóbal a partir de las 10:00.
Este año, un incendio provocado por quema de pastizales devoró cerca de 2.000 hectáreas de bosque en el Parque Nacional Caazapá. El hecho se constituyó en una catástrofe de la que difícilmente se pueda recuperar a corto plazo.