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Blas Zapag se despachó contra las constantes medidas que el Gobierno intenta aplicar sobre el sector de los combustibles, que -según aseguró- atentan contra el libre mercado y contra los mismos consumidores. Comentó que uno de los casos se produjo con el decreto que dispone que las firmas privadas -inclusive las importadoras- compren combustible únicamente de Petropar. La disposición, que afectaba particularmente al gasoil común y las naftas, generó la reacción de los emblemas, algunos de los cuales incluso accionaron ante la justicia.
Siguiendo con las “curiosas medidas”, se determinó el uso -de manera exclusiva- del alcohol proveniente de caña de azúcar en las mezclas con las naftas, cuando puede resultar más conveniente para el sector privado el uso del alcohol de cereales, según explicó. Zapag advirtió que la intención del Gobierno de favorecer a un sector -como los cañicultores- termina perjudicando a otro, como las fábricas que trabajan con cereales. “No se puede producir alcohol de cereales como uno quiere”, lamentó.
Señaló que el Gobierno intenta limitar el uso del alcohol de cereales únicamente cuando el producido a partir de la caña de azúcar no abastece. “Quieren que se use primero el alcohol de caña y, cuando termine el alcohol de caña, producir el de cereales. Acá está el autoritarismo”, señaló en contacto con Canal 100.
Otra de las medidas contra las cuales protestó Zapag fue la disposición de una ley según la cual “debemos usar diésel con el 1% de biodiésel”. Indicó que el sector privado reaccionó y pidió previamente estudios al INTN sobre las consecuencias de esta combinación. Adelantó que no acatará la reglamentación mientras no culmine un estudio científico serio.
“No me voy a arriesgar, que hagan lo que tengan que hacer, que cierren las estaciones que tengan que cerrar, pero hasta que esto esté en forma no vamos a mezclar biodiésel con diésel”, sostuvo. Señaló, asimismo, que sin un análisis serio, los que finalmente podrían terminar perjudicados son los automovilistas. Se menciona la posibilidad de que la mezcla dañe o afecte de alguna manera los motores. “Ese es el problema”, manifestó.
Blas Zapag adelantó que inclusive prevé accionar ante la Justicia si persisten las medidas de esta naturaleza sobre el sector privado. “Que me dejen trabajar, que me dejen de romper las bolas; solo eso pido”, manifestó. Añadió que “necesito tiempo para dedicarme a las cosas importantes”. Indicó que la actitud del Gobierno llegó a tal punto de denunciar al emblema Copetrol cuando un camión cisterna cayó a un cauce hídrico a causa del mal estado de un puente que finalmente se desplomó, en Benjamín Aceval.