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A través de un comunicado, el Partido de los Trabajadores (PT) se solidariza con los productores y repudia la actitud mezquina de los empresarios del sector, que optan por dejar en la calle a más de 1.000 obreros del ingenio azucarero antes que pagar un precio justo a los productores.
Denuncias realizadas indican que existen ingenios azucareros que son los principales contrabandistas de azúcar. “Lo que hacen es nacionalizar la mercadería; le dan certificado de nacimiento paraguayo”, explicó un periodista, según el comunicado del Partido.
Pese a que la firma culpa del conflicto al contrabando, tanto el gobernador actual como el entrante, Ramón Magín Lichi y Rodolfo Friedmann, respectivamente, sostienen que es la propia empresa la que recurre al ingreso ilegal de mercaderías, convirtiéndose así en una “envasadora”.
“Debe ser el Estado el que garantice una producción agroecológica, suministrando créditos, insumos, herramientas y tecnologías de manera a asegurar mayor productividad por hectárea de la caña de azúcar y de todos los productos agrícolas”, exige el PT.
Finalmente, indican que el Estado debe garantizar el proceso de comercialización de toda la producción a través de centros de mercadeo adecuados, así como fijar una base en los precios, de manera a asegurar que el productor reciba el precio justo por su producto.
Desde tempranas horas y con más productores en sus filas, los cañicultores del Guairá reiniciaron sus protestas, exigiendo el pago de G. 200.000 por hectárea a la azucarera Azpa, que habría pedido una suspensión de actividades.