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Las peticiones del gremio yerbatero se dieron durante una reunión que mantuvieron esta tarde con el jefe de gabinete del Poder Ejecutivo, Juan Carlos López Moreira, en la Municipalidad de esta ciudad.
“Sabemos que el Gobierno no puede fijar el precio, pero puede, de acuerdo a lo que dice el Estatuto Agrario en su artículo 25 inciso G, impulsar el comercio justo de la producción campesina, incentivando la comercialización asociativa”, señaló Manuel Medina, dirigente del sector.
Medina reclamó además una distribución más equitativa de las ganancias, y que no solamente un sector, el de los industriales, se beneficie con el rubro. “Los productores de yerba mate en Itapúa llevamos muchos años en esto, no somos ningunos improvisados, y sabemos por el estudio de costos que se puede pagar hasta 1.810 guaraníes por kilo. Sin embargo el sector industrial paga 1.600”, señaló el representante.
Admitió, sin embargo, que existen casos, como la cooperativa Colonias Unidas, en que sí se pagan los G. 1.800 reclamados por los productores hojeros.
Mario Escobar, otro de los productores asistentes a la reunión, requirió al gobierno acciones concretas y firmes para frenar el contrabando de palillos de yerba mate que ingresan desde Argentina. “Este palillo es comprado a muy bajo precio por los industriales, porque es desecho destinado a abono en las chacras en el vecino país, y luego es mezclado con la hoja de yerba que se compra de los productores locales”, denunció.
El ministro de Gobierno, por su parte, prometió que las inquietudes serán trasladadas a los ámbitos correspondientes del Gobierno nacional. Aseguró a la vez que se buscará la mejor salida y un punto de equilibrio a los planteamientos. Respecto de un posible subsidio, López Moreira señaló que es un tema difícil que se dé, y prácticamente descartó tal posibilidad.
Subir el precio de la yerba canchada
Para que se dé la posibilidad de pago de G. 1.800 por kilo de hoja verde, tal y como piden los productores, “las industrias deberían aumentar el precio que están pagando por la hoja canchada”, dijo a su turno Alcibiades Cabello, propietario de un secadero de yerba en el nordeste de Itapúa.
Según el industrial, las empresas están pagando entre G. 5.500 y G. 6.000 por la yerba canchada, y con este precio no sobra margen para pagar los G. 1.800 que reclaman los productores. La yerba canchada es el primer paso en la industrialización de la yerba mate.
“Tenemos muchas exigencias que cumplir en cuanto a calidad, como el nivel de humedad, la presencia de puntas negras y muchas veces una carga que llega a la industria y es rechazada implica un gasto de G. 5 millones, sólo en transporte”, señaló Cabello.
El industrial dijo también que al bajo precio se suma que este año se está produciendo la disminución de la compra de la yerba canchada. Sin mencionar nombres, dijo que existen industrias que compran yerba que ingresa de contrabando desde Argentina, donde existe una superproducción este año, y eso tergiversa el mercado.
Por su parte, el presidente del Centro Yerbatero Paraguayo, Eduardo Oswald, sostuvo que el sector industrial analiza la posibilidad de aumentar el predio de la canchada, para que los secaderos a su vez puedan mejorar el precio por la hoja verde. “Ahora se está pagando G. 5.890 por el kilo de la yerba canchada, estamos estudiando elevar por lo menos a G. 6.100 para que los secaderos puedan absorber ese costo de 1.800 por la hoja verde”, explicó. Señaló que para la próxima semana se tendrían novedades al respecto.