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Ahora, el juez de ejecución Eliodoro García, quien le otorgó el permiso para realizarse algunos estudios psiquiátricos y psicológicos, volvió a ordenar su captura al percatarse dque el hombre nunca regresó a prisión. Se trata de Felipe Acosta Riveros, condenado por un robo agravado cometido en 2005 en Santa Rita (departamento de Alto Paraná), pero que guardaba reclusión hasta el 18 de febrero en la cárcel de San Pedro. Según los datos, fue sentenciado por matar y enterrar a su patrón, un colono japonés, en Santa Rita.
Según los datos, el delincuente solicitó permiso para realizarse algunos estudios médicos el 12 de febrero pasado por recomendación del médico forense Julio César Zarza. El pedido finalmetne lo obtuvo cinco días después. Posteriormente, volvió a solicitar una prórroga de diez días más, lo cual sugestivamente obtuvo nuevamente el 7 de marzo. Acosta Riveros debía presentarse a la penitenciaría el pasado 17 de marzo, pero nunca regresó, por lo cual el juez Eliodoro García pidió su captura.
Según indicó el magistrado, le otorgó el permiso respaldándose en el informe del médico forense Julio César Zarza y la fiscala de Ejecución de Coronel Oviedo, Norma Solís. Indicó que el condenado debía tener constantemente una custodia policial y de la penitenciaría, por lo cual no se explica cómo se fugó. "Dimos la orden de que salga, pero debía estar con custodia constantemente; evidentemente algo falló en la penitenciaría", dijo el magistrado.
En tanto, el director de la cárcel de San Pedro, Cristian Ortiz, indicó que él no está autorizado para brindar detalles a la prensa. Agregó que el único que debe hacerlo es el director de Establecimientos Penitenciarios, Artemio Vera, pero éste no atiende las llamadas telefónicas. Acosta Riveros ya había escapado en 2011 de un hospital de Ciudad del Este, donde había sido atendido justamente por un supuesto problema de salud.