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Según información brindada por la Policía Nacional la semana pasada, Francisco Javier Salas Rodas, supuesto líder de la banda de abigeos que el viernes 17 de marzo por la noche habría asesinado al subjefe de la comisaría 20ª de Teniente Esteban Martínez -suboficial principal Luis Alberto Riquelme Espinoza- fue hallado muerto al día siguiente en el mismo monte donde ocurrió el enfrentamiento precedido por una toma de rehenes.
Este hecho es cuestionado por Carina Rodas, hermana del abatido, quien asegura que las evidencias encontradas en el cuerpo de su hermano no coinciden con la versión brindada por la Policía Nacional. Sigue pidiendo que el hecho se esclarezca.
En una entrevista con ABC Cardinal, detalló que el cuerpo de su hermano presentaba quemaduras, además de rastros de una gran cantidad de proyectiles que causaron su muerte. Aseguró que ese hecho no fue participado a la familia y que el cuerpo sin vida de su hermano ya les fue entregado con ropa de funeraria.
“Yo retiré el cuerpo y cuando llegamos al salón velatorio levanté su ropa y tenía señales de quemaduras. En el cuerpo está todo. Yo quiero que se esclarezca, que se diga la verdad. Yo voy a llamar a pedir disculpas si me dicen que realmente fue así (la versión de la Policía)”, clamó.
Señaló además que la ropa que llevaba al momento del enfrentamiento “Pancho”, como se conocía a su hermano, tenía un fuerte olor a gasolina pese a que fueron lavadas, coincidiendo con la versión dada por los familiares de la novia del fallecido, una adolescente de 16 años que también resultó herida al momento de los hechos y que ahora se encuentra internada en el Hospital de Trauma.
La mujer reveló además que su familia está siendo amenazada luego de realizar la denuncia por las contradicciones en lo que tiene que ver con la muerte de su hermano, aunque no especificó de quiénes provienen.
Salas tenía antecedentes y órdenes de captura por abigeato y homicidio. Además, era buscado desde hacía un año por haber supuestamente matado al sereno menonita Leonard Voth Bartel, de 32 años, en un asalto en una sucursal de la cooperativa Fernheim de la aldea Molino de Filadefia.