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Luis Pereira, vicepresidente del Centro de Importadores de Vehículos Usados (CIVU), aseguró este martes en conversación con radio ABC Cardinal que la clase media-baja será la más afectada en el caso de que el Gobierno decida aplicar el impuesto al consumo selectivo a la importación de estos vehículos, conocidos popularmente como “chileré”, por traerse desde países asiáticos a través de Iquique y otros puertos chilenos.
“Nuestro negocio afecta a mucha más gente. La franja media alcanza a 3.500.000 personas, que va a pagar más caro por tener un vehículo de su preferencia. La gente prefiere nuestro producto, por más de que tenga volante cambiado (...) A la clase media-baja impacta”, expresó Pereira a la 730AM.
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El empresario agregó que su gremio “no quiere llegar a los límites de 2010”, cuando se cerraron las fronteras para reclamar medidas similares. “Pero si tenemos que hacer, vamos a hacer”, amenazó.
“Van a bajar nuestras ventas. La gente va a ir a las motos, vamos a decirle. Siempre hay un sector que va a salir favorecido de esta jugada. ¿Y los 0 km por qué no pagan (impuestos)?”, se preguntó Pereira.
Pereira dijo ayer, durante una manifestación de los importadores, que protestan no solo en contra del impuesto selectivo al consumo sino también en contra de la lista diferencial o tabla de valoraciones que establece los tributos de acuerdo al precio declarado de los automóviles importados.
Denunció que en la lista diferencial se registraron incrementos de entre el 30% y 40%. No obstante, las autoridades de la Dirección Nacional de Aduanas hablan de una subvaloración a la hora de declarar el precio de mercado de los vehículos usados.