Petardos: atención con su uso

El doctor Jesús Marín, cirujano experto en reconstrucción de manos del Hospital del Trauma, brindó algunos consejos sobre hábitos de emergencia que se deben poner en práctica en el caso de sufrir un accidente manipulando petardos en estas fiestas.

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Estamos a días de las fiestas de Navidad y Año Nuevo, fechas claves para los médicos del Hospital del Trauma, pues normalmente reciben a una significativa cantidad de niños y adultos víctimas de accidentes con explosivos, también juegos de pirotecnia.

Ante esta situación, el doctor Jesús Marín, cirujano plástico y experto en reconstrucción de manos del Hospital del Trauma, tiene el anhelo de que para este fin de año, la cifra de accidentados en estas circunstancias disminuya.

Es por eso que brindó algunas recomendaciones a tener en cuenta, para manipular con mayor conciencia los petardos en los próximos días festivos.

En primer lugar, es importante saber que los artefactos pirotécnicos se clasifican en dos en relación a las lesiones que producen:

Los de pólvora blanca: estrellitas, llamita, bengala, etcétera. No producen explosión, solo artificios.

Pueden causar quemaduras hasta segundo y tercer grado.

Los de pólvora negra: “rompe portón”, “bola de laíno”, “cebollón”. Generalmente la lesión se produce porque el que apaga la mecha es el viento, entonces, la persona no se da cuenta y se acerca, sufriendo la detonación y el consecuente accidente.

Consecuencias del “fosforito”

Este es uno de los juegos pirotécnicos más utilizados por niños de todas las edades, aunque el doctor Marín explicó que la edad recomendada es a partir de 8 años.

Los accidentes se producen por lo general cuando el niño, al sujetar el fosforito con el índice y el pulgar, sufre una lesión en el pulpejo, parte que está por debajo de la uña, y que es la que tiene mayores terminaciones nerviosas, además de una conexión directa con el cerebro.

Si esta parte del dedo se lesiona, el paciente puede sufrir pérdida total de la sensibilidad de por vida.

A continuación, el especialista detalla cuáles son las reacciones de emergencia que se deben tener en caso de que se encuentre ante una lesión producida por juegos de pirotecnia.

-Bajo ningún caso aplique pasta dental ni ninguna otra crema sobre la lesión.

-Sumerja una toalla en agua fría, cubra la lesión con la tela y eleve el miembro lo más alto posible (de tratarse de un brazo o una pierna).

-Acuda inmediatamente al Centro Nacional del Quemado.

-Si hay pérdida de sangre, eleve la mano a la altura del corazón. Nunca haga torniquete, pues la sangre en estos casos solo se detiene por compresión, explicó el facultativo.

Recuerde que un segundo de diversión se puede convertir en toda una vida destrozada.

¿Qué hacer ante desprendimiento o amputación de dedos?

Aunque suene fuerte decirlo, esto es algo que puede ocurrir durante un accidente con petardos.

Tenga en cuenta las siguientes medidas de emergencia ante la amputación o separación de un miembro de la mano.

Es posible salvar un dedo y reponer el daño utilizando hueso, nervio, tendón o piel para restaurar la parte amputada, explicó el doctor Marín.

Para eso, debe poner el miembro en una bolsita de polietileno, que a su vez debe ponerlo en un recipiente con agua junto con tres cubitos de hielo, para mantener una temperatura ideal y que el miembro llegue con una viabilidad para que permita a los médicos trabajar.

El procedimiento mencionado debe realizarse lo más rápido posible.

La cirugía para una lesión mediana de la mano cuesta arriba de los G.10 millones, informó el médico.

Si se trata de una lesión mayor, el procedimiento ronda los G. 70 millones.

El motivo del elevado costo, según dijo el doctor Marín, es que para llegar a la funcionalidad (que se mueva de nuevo el dedo) se requiere más de una cirugía.

Un gramo de pólvora equivale a 35 kilos de fuerza , y un explosivo pequeño tiene entre cinco a 7 gramos. Esto explica la gravedad de las lesiones producidas por juegos de pirotecnia.

En la Navidad del año pasado, el doctor Marín atendió 24 casos de quemaduras quirúrgicas.Hubo muchas otras más pero que solo requirieron tratamiento ambulatorio.

 

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