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Solo los pacientes con esta dolencia que tienen un buen control de su nivel de azúcar pueden degustar los chocolates, pero los que no tienen un buen registro de sus niveles de azúcar definitivamente deben evitar comer golosinas en esta fiesta. "Las personas con esta enfermedad crónica que hagan caso omiso a esta recomendación corren el riesgo de descompensarse y hasta de caer en un coma diabético", explicó la Dra. Tania Paiva, directora del Programa Nacional de Diabetes.
La profesional destacó que estos productos no están libres de glucosa, es decir, tienen azúcar, por lo que no debe ingerirse en exceso. “Hay que tener en cuenta que, además del azúcar, contienen muchas calorías y grasa, por lo que tampoco es recomendable para quienes cuenten con sobrepeso u obesidad o presenten dislipidemia (triglicéridos y colesterol elevado)", señaló.
El consumo de chocolate debe limitarse a una sola vez cada 15 días. Preferentemente, deben ser chocolates negros, amargos o semiamargos, dijo la especialista.