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La Asociación de Propietarios de Estaciones de Servicio y Afines (APESA) lamentó en un comunicado que pese a los esfuerzos de la agremiación por erradicar las organizaciones dedicadas al tráfico ilegal de combustibles a través de persecuciones y desmantelamentientos, la práctica continúa bajo el amparo de autoridades que deberían denunciar estos hechos.
En este sentido aseguran que "si el consumo mensual de combustibles en el país, para el parque automotor, según registros oficiales, es de 160 millones de litros, debemos estimar que existen 20 millones de litros por mes que ingresan por contrabando y por ordeñe de combustible, los cuales dejan de tributar al fisco cuanto menos G. 16 mil millones en concepto de impuesto selectivo al consumo".
El comunicado firmado por el gerente de Apesa, Roberto Poletti, asegura que es "una verdadera tristeza y desilusión leer informaciones (publicadas en la prensa)".
En otro punto, lamentan que los exitosos operativos llevados a cabo en Concepción y Ñeembucú para desmantelar este tipo de organizaciones, hayan tenido que derivar en la destitución del capitán Conrado Cáceres, quien junto con el fiscal Ricardo Merlo, encabezaban los operativos para desbaratar estas bandas de delincuentes.
"Hoy en día a cargo de la Armada Nacional se encuentra el capitán Antonio Vallejo Abadíe quien había sido imputado por casos de ordeñe. Precisamente en el caso imputado se allanó, reconociendo haber sido partícipe del hecho en cuestión", señalan para agregar luego que "lo cierto y concreto es que con las nuevas autoridades de la Marina el ordeñe de combustible ha vuelto con todas sus fuerzas y nuevamente hoy tenemos informes de diversas modalidades en todos los puntos que habían sido denunciados".
Finalmente sostienen que causa lástima y desazón ver como el presidente de la República, Horacio Cartes, ordena acciones frontales contra estos flagelos, pero que son incumplidas por sus subalternos quienes en muchos de los casos estarían operando como cómplices o cuanto menos como encubridores.