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El senador Paraguayo Cubas nuevamente dio de qué hablar esta mañana cuando se suspendió la sesión ordinaria, convocada para las 09:00, a falta de quórum. Ante la ausencia masiva de sus colegas, pidió que los que no se presentaban para las sesiones ordinarias reciban un descuento de G. 10.000.000, ya que solo se tienen cuatro al mes.
Luego reaccionó de manera ofuscada y hasta violenta en contra de varios de sus colegas, como Silvio “Beto” Ovelar, Desirée Masi, Juan Darío Monges y Antonio Barrios. Este último senador incluso confirmó que Payo intentó empujarlo, pero logró detenerlo antes de que eso pase.
Beto Ovelar anunció posteriormente que se tomará las medidas necesarias para sancionar a Cubas debido a sus reiteradas intervenciones dentro de la Cámara. “Estamos dando una imagen bochornosa y lamentable a la ciudadanía. Fui muy aristocrático en un momento determinado, cuando lo exigía el señorío. Hoy ya no voy a entrar en ese tipo de cursilería”, advirtió.
A su vez, en ese momento, Payo adelantó que su actitud podría empeorar en caso de que se realice una sesión extraordinaria sin aplicar el descuento que pidió para los que no llegaron a tiempo. “Si Trato Apu'a (Ovelar) empieza la sesión extra sin descontar a estos que no estuvieron acá, hendýta kóa”, amenazó, e incluso advirtió a Ovelar que quemaría el Congreso, con él adentro, si iniciaba la reunión.
En ese mismo contexto, incluso incitó a la ciudadanía a quemar la sede legislativa. También arremetió en contra de los periodistas, a quienes incitó a seguir "buscándolo", ya que afirmó tener audios en los cuales se les escucha solicitando dinero para publicaciones.
“Acá no va a haber sesión”, advirtió Cubas, notablemente ofuscado e intentando impedir que se inicie la sesión extra. Uno a uno, reaccionó en contra de prácticamente todos sus colegas, señalándolos y calificándolos de “delincuentes”.
Ante esa actitud, Ovelar decidió levantar la sesión alegando que “no puede hacer el uso de la fuerza” ante el comportamiento de su colega. Lamentó nuevamente la actitud de su colega Payo Cubas.
“Un akaperõ pelado y loco los pone en su lugar a todos”, ironizó Paraguayo, todavía muy ofuscado luego de que se haya levantado la sesión.
Pese a esa determinación, la mayoría de sus colegas aguardaron sentados, solicitando el desarrollo de la sesión extra, pues alegaron que se debe tratar unos 15 proyectos importantes. Por ello, Cubas prácticamente ocupó la mesa del presidente del Senado con la intención de impedir que se cumpla el pedido de los demás parlamentarios.
En ese ínterin, Ovelar pidió a todos los periodistas y funcionarios que abandonen la sala de sesiones para “conversar” en privado entre todos los senadores que continúan sentados en sus bancas.
“Hay temas que la gente está esperando que se resuelva acá (…) Este tipo de actitudes quiero que él (Cubas) reflexione a quién le perjudica”, manifestó por su parte Carlos Filizzola, quien también pidió que el pedido de Payo referente a las multas se trate en la Mesa Directiva.
En varios momentos, Cubas discutió con Desirée Masi, contra quien utilizó todo tipo de insultos violentos y despectivos. Habló nuevamente del caso del caso de “los helicópteros de Rafael Filizzola” y la calificó de “hija de...” y “corruptita”.
Cuando tomó la palabra, la senadora reiteró su solicitud de realizar la sesión y cuestionó duramente la actitud de Cubas. “No te tenemos miedo, Payo. Jamás. No le tuvimos miedo a un patrón y no te vamos a tener miedo porque apuntás y generalizás”, le advirtió, ya también bastante molesta ante los insultos recibidos.
Luego, Payo Cubas nuevamente tomó la palabra, esta vez ya con una actitud un poco más calmada y, desde su banca, insistió en que se tome la determinación de multar a sus colegas que no ingresaron a la sala de sesiones pese a estar dentro del Congreso. Sin embargo, la calma duró poco porque nuevamente discutió violentamente con Masi, quien fue hasta su lugar para amedrentarlo.
En ese momento, el senador Pedro Santacruz también se acercó hasta él y le pidió que se calme, ínterin en el cual le dio un ligero golpe en la cabeza, a modo de “saplé”. Luego, solicitó a Ovelar que se priorice el proyecto de ley referente al cáncer, recordando su propia lucha en contra de dicha enfermedad.
Payo trató de ignorar ese amedrentamiento por parte de Santacruz y señaló que no reaccionaría ante ese golpe, porque “respeta a su enfermedad”.
En principio, el titular de la Cámara aseguró que solo se trataba de una “conversación”. Sin embargo, luego de varias intervenciones de sus colegas, quienes insistieron en el inicio de la sesión extra, cerca de las 10:45 finalmente Ovelar cedió y ordenó el inicio del debate sobre el primer punto en el orden del día de la sesión, con 35 senadores presentes.