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Tras las sorprendentes declaraciones de la adolescente que tragó soda cáustica y que dieron un giro de 180 grados al caso en el que supuestamente fue agredida física y sexualmente, los imputados en la causa Rosa Lorena Delvalle, su patrona, y Anderson Ríos, la pareja de esta última, solicitaron mediante su abogado defensor el cese de estado de rebeldía que pesaba sobre ellos, según informó el fiscal asignado a la causa, Martín Areco.
Luego de este pedido, el pasado viernes el Juzgado dictó resolución haciendo lugar y consecuentemente, fijó que el próximo jueves 30 de marzo ambas personas comparezcan ante la justicia. A partir de allí, el juez encargado deberá decidir si la medida cautelar será a favor o en contra de los mismos.
Areco aclaró que si bien solicitaron dicha medida “los procesados en teoría se han presentado, pero hasta el momento no se pusieron a disposición de la justicia”.
Respecto a las contradicciones en lo que se manejaba en principio sobre el caso, el agente fiscal consideró que lo relatado por la menor a las autoridades que se constituyeron en el Hospital de Trauma “es una versión que ya había dado el 13 de enero cuando fue entrevistada por la psicóloga del poder judicial”. Admitió en este sentido, que se contradice con el informe de la asistente social de la misma institución, por lo que aseguró se encuentran abocados a profundizar las investigaciones.
La sorpresiva declaración de la adolescente frente al juez Édgar Ramírez, en la cual señaló que trató de suicidarse ingiriendo soda cáustica luego de descubrir una infidelidad de su novio, generó la atención de los investigadores. Este testimonio beneficia a Delvalle y Ríos, quienes actuaron desde la clandestinidad recién la semana pasada, tras un par de meses que permanecieron prófugos, por la sospecha existente de que casi mataron a la joven.