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Gustavo Benítez, de Paragay, manifestó a ABC Color que la Iglesia católica debe diferenciar el matrimonio civil del religioso cuando realizan ese tipo de declaraciones al rechazar la unión civil de dos personas del mismo sexo. “Ellos tienen todo el derecho de defender lo religioso, pero acá nosotros estamos hablando de un derecho garantizado en la Constitución Nacional y en el Código Civil, lo cual hoy no es igualitario para todas las personas”, indicó Benítez.
Esto fue a raíz de que en la víspera laicos de la Iglesia católica declararan ante los obispos que durante este año trabajaron en el rechazo de la posible legalización de la unión de personas del mismo sexo y el aborto, así como en el pedido de la demolición de un monumento masón.
Benítez, además, explicó que lo que buscan es que desaparezca esa discriminación con este tipo de exclusiones: “La Iglesia responde a su dogma, lo cual para nosotros como organización civil respetamos”, manifestó, a la vez de señalar que el amor entre dos personas del mismo sexo no tiene por qué “valer menos”.
Igualmente, el representante de Paragay dijo que toda esta “persecución” sigue siendo el juego de la catolicismo y que “en algún momento de la historia se oponían al matrimonio civil, después cuando se aprobó el divorcio también se opusieron, y el matrimonio entre blancos y negros para ellos no fue bien visto, ese es un juego, y ahora se meten con los homosexuales, que somos objeto de discriminación”, finalizó Benítez.
Consultado sobre si tienen algún plan de pedido de aprobación del matrimonio gay ante el Congreso, sostuvo que hay planes a largo plazo: “Estamos haciendo pequeñas sensibilizaciones desde la gente, presentar un plan al Congreso es muy desafiante. Queremos crear una infraestructura social, política y cultural para tener sostén a la propuesta, nos estamos dedicando a eso”, subrayó.