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El escándalo de corrupción que costó la caída del presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, sigue tomando nuevos matices, más aún ahora que el exmandatario y la exvicepresidenta del país centroamericano afrontarán un juicio por haber montado un esquema que saqueó a esa nación.
Y la nueva página del escándalo guatemalteco afecta ahora a empresario y banqueros, sobre los cuales la Interpol emitió orden de captura internacional. La lista de buscados es encabezada por Alba Elvira Lorenzana Cardona, esposa de Ángel González, el magnate de la televisión, pues es dueño de todos los canales de televisión abierta de Guatemala; también posee emisoras de radio y hasta una cadena de salas de cine, según relata el portal Mundiario.com.
La Fiscalía y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) descubrieron una red criminal en que están involucradas grandes empresas, incluidos medios de comunicación y constructoras, que financió de manera ilegal al Partido Patriota (PP) liderado por Pérez Molina para su llegada al poder en 2012.
Así, eludiendo los controles del Tribunal Supremo Electoral (TSE) , empresas del magnate mexicano de los medios de comunicación Ángel González, como Canal 3 y Canal 7, pagaron entre 2008 y 2011 más de 17 millones de quetzales (2,2 millones de dólares) que se destinaron a la compra de vehículos para propaganda del PP, informa la agencia española EFE.
Como contraprestación, tras su llegada al Gobierno en 2012, el Ejecutivo de Pérez Molina otorgó contratos de publicidad a estas empresas por valor de más de 240 millones de quetzales (26,2 millones de dólares) , de acuerdo con la investigación. Este esquema de financiación ilegal y recompensas se repitió, según la investigación del Ministerio Público (MP-Fiscalía) y la CICIG, en decenas de casos, yendo el dinero en muchos casos a parar a los patrimonios de Pérez Molina y Baldetti.
Participaron de esta red criminal medios de comunicación, grandes constructoras y personas particulares, que se ocultaban bajo el entramado de empresas creado por el ex secretario privado de Baldetti, Juan Carlos Monzón, quien ahora es colaborador eficaz de la Fiscalía. Una vez asumido el cargo, el exbinomio presidencial otorgó contratos ventajosos a estas empresas, así como a otras a las que exigió comisiones que alcanzaron al menos 500 millones de quetzales (65,5 millones de dólares).
González no solo es dueño de todos los canales de televisión abierta de Guatemala, sino que es propietario de una de las redes de medios de comunicación más extensa en toda Latinoamérica: Albavisión, a través de la cual posee más de un centenar de medios en toda la región, incluido Paraguay.