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El acto contó con la presencia del ministro Oscar Bajac y numerosas autoridades judiciales y políticos del Chaco Central, quienes firmaron en la ocasión un memorando de entendimiento con la CSJ. El programa de facilitadores judicial promueve la Organización de Estados Americanos (OEA) para crear una red nacional de líderes comunitarios, quienes voluntaria y gratuitamente se desempeñan para mejorar el acceso a la justicia, para personas en condiciones de vulnerabilidad al momento de querer hacer valer sus derechos.
Los facilitadores no cumplen funciones jurisdiccionales sino constituyen un puente de comunicación entre los operadores de Justicia y miembros de su comunidad. Ennio Arguello Silva, gerente de la Región Sur de la OEA destacó que Paraguay fue el segundo país de la región en establecer un sistema nacional de facilitadores judiciales, hoy habilitado con casi 2.800 facilitdores en los 17 departamentos del país, para atender unos 1.500.000 paraguayos en situación de vulnerabilidad.
El ministro Bajac dijo que la CSJ debe mirar con ojos más cariñosos a Boquerón, porque aquí se nota muchísimo las diferencias en cuanto a la cuestión social y económica. Le reclamó al diputado presente Cornelio Sawatzky (ANR) que hace tres años están pidiendo a la Cámara de Diputados la aprobación de un proyecto de ley, que otorga más funciones a los jueces de Paz, de manera que puedan solucionar los problemas de la gente pobre. “Le ruego que impulsen este proyecto, para que puede ser aprobado. Así vamos tener mas cobertura judicial a la gente en estado de vulnerabilidad”, dijo.
Instó al gobernador de Boquerón, intendentes del Chaco Central, a los jueces y magistrados a ayudar al pobre, porque es el primero en ir a trabajar a la mañana y a votar en las elecciones. “Los servicios deben llegar a la gente, en especial a la gente humilde”, apuntó Bajac.
El director nacional del Sistema de Facilitadores Judiciales Rigoberto Zarza habló de una gran brecha existente entre sociedad y justicia, una desigualdad en el acceso a la justicia, afirmando que Boquerón es el departamento donde más se siente esta brecha, en áreas como la niñez, violencia familiar, indígena o el consumo de drogas que esta desintegrando a familias, citando su preocupación sobre la situación que se viven en Loma Plata.
Por su parte el gobernador Edwin Pauls agradeció por impulsar este programa también en Boquerón, mientras el intendente de Filadelfia Holger Bergen anuncio que a la CSJ se acaba de donar un predio de 11.000 m2 para una sede propia en Boquerón.