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“A mi criterio, sigue siendo inconstitucional porque los fondos jubilatorios -por la Constitución Nacional- no pueden ser usados para otros fines. Los que aportan acumulan dinero para la jubilación, no para la salud de otros; esos fondos dan renta y esa renta es para jubilación, no para otras cosas”, dijo en contacto con ABC Cardinal Pedro Ferreira, expresidente de la previsional, con respecto a la Ley 5.655/16, que habilita al Ejecutivo a utilizar fondos jubilatorios para obras.
Además, Ferreira señaló que cuando se pretende ensayar un nuevo esquema se debería ir de menos a más; sin embargo, en este caso, de un solo tajo el Gobierno está habilitado a usar hasta el 40% de los fondos de los jubilados. Lamentó, además, que la forma en que está redactada la ley es "muy vaga"; sin embargo, esbozó que en términos prácticos usarán el dinero de los actuales jubilados para obras de salud y a estas personas les seguirán pagando la jubilación con lo que la gente joven aporta hoy para su futura jubilación.
“Esta es la forma de transferir los problemas de una generación a la siguiente, y acá es donde quiero que me escuchen los jóvenes: si nosotros, los que tenemos cierta edad, empezamos a utilizar los fondos jubilatorios para problemas de salud, qué es lo que va a suceder con la siguiente generación. Cuando la siguiente generación llegue a la edad de jubilarse, los fondos jubilatorios ya no van a existir porque se va a haber gastado todo en el área de salud”, explicó.
Dijo que, si eso ocurre, lo único que podrá hacer el Gobierno es elevar el monto de los impuestos y de las cuotas de seguro social para cubrir el agujero que tendrán en ese momento. Reconoció que la ley contiene cuestiones interesantes, como las medidas punitorias en caso de fraude; no obstante, como solución al problema financiero que tiene el IPS, remarcó que no está de acuerdo. “No estoy de acuerdo con esta solución. Yo creo que si realmente hay, porque aparentemente hay un problema financiero en IPS, ese problema tenemos que pagarlo ahora, nosotros”, señaló.
Días atrás, los jubilados advertían sobre las pretensiones del Poder Ejecutivo de comenzar a usar los fondos de los jubilados y señalaban que el Gobierno nunca pagó el 1,5% mensual que debe aportar al IPS, que el Estado tiene una deuda de más de US$ 500 millones con la previsional y que no se le puede dar crédito a un moroso. Dijeron en aquella ocasión que no existen garantías para creer que, cuando llegue el momento de que los cotizantes de hoy cobren sus jubilaciones, el Gobierno habrá devuelto el dinero que usó para obras.