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Angilberto Paredes, director del Instituto Nacional de Salud, salió al paso de afirmaciones de médicos residentes que aseguran que la pasantía rural-requisito para obtener una subespecialidad médica- es un proyecto improvisado, que carece de un reglamento.
“Este programa fue ideado hace tiempo, con el cual se viene trabajando y es una de las cosas bien hechas de administraciones anteriores. Existe una resolución ministerial N° 277, del 20 de abril de 2011, por la cual se cimienta su implementación”, refirió.
Los residentes, a través de sus representantes, entre ellos el Dr. Miguel Rondelli, presidente de la Asociación de Médicos Residentes del Hospital Nacional, aseguran que no se resisten a realizar dichas pasantías, sino que solicitan condiciones adecuadas para llevarlas a cabo.
A este respecto, el director aseguró que “estas pasantías forman parte de una oportunidad que ellos pueden aprovechar para ver las condiciones de trabajo y tomar arraigo en esos lugares”.
Por otro lado, indicó que son sólo diez meses con un horario bastante flexible de 36 horas semanales, para que los médicos puedan seguir estudiando: “Con esto van a conocer mejor la realidad del país y elegir con mayor criterio la especialidad médica que se está precisando”, agregó el Dr. Paredes.
En referencia a la remuneración que reciben los médicos pasantes, Paredes informó que la misma se triplica con respecto al servicio remunerado de residentes en Gran Asunción que perciben G. 4.000.000.
“Nosotros como Ministerio de Salud propusimos a los residentes pagar G. 11.500.000 a aquellos médicos que van a estar ejerciendo la profesión a más de 400 kilómetros de distancia. Ellos quieren ganar G. 14.000.000”, explicó el director.
Además dijo que los motivos por lo que es imposible acceder a ese pago es porque se encuentran con un tope presupuestario por ley, puntualizó.