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En el encuentro se rubricó un documento en el cual se establecieron 16 puntos para combatir contra los virus del dengue, el zika y la fiebre chikunguña. Los ministros de salud de los distintos países conciliaron medidas comunes en 16 puntos que a partir de ahora se deberán poner en práctica.
Entre las estrategias de salud pública que se implementaron, se destacan un abordaje integrado con respecto a las tres enfermedades que afectan a nivel internacional, y que son contagiadas por un mismo vector.
Además, se instó a la población a generar un cambio tanto en la conciencia como en el comportamiento, pues, según dijo Miguel Dávila, es la única manera de controlar la epidemia.
Otra de las determinaciones de la convención fue diseñar y ejecutar campañas para llegar a la comunicación. De este punto se derivó también la decisión de fortalecer los mecanismos de comunicación. “Queremos que a la población le llegue información de alta calidad, con evidencia científica, de manera a evitar los mitos, que son tan comunes cuando surgen las epidemias”, puntualizó el especialista en salud familiar de la OMS y la OPS.
Al consultársele cuál es el factor que hace que la epidemia se expanda de manera tan acelerada, el médico citó las condiciones climatológicas, que favorecen a la existencia del vector.
En otro momento, el especialista señaló la necesidad de generar un cambio en la cultura de la gente con respecto a la higiene. “No podemos esperar que venga alguien a limpiarnos la casa. Debemos tener una adecuada disposición de la basura, para que el vector no se reproduzca fácilmente”.
Sobre las numerosas informaciones que circulan en la web, que hablan de que la transmisión del zika se da por vía sanguínea y sexual, el médico señaló que estas teorías aún se deben tomar con calma. “Debemos esperar que la investigación sea más contundente”, mencionó.