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Un total de 15 enfermeros y seis médicos de la unidad de Terapia reclaman el pago del aguinaldo desde hace semanas.
Uno de los afectados, quien pidió reservar su identidad por temor a represalias, dijo que sus salarios provienen del Fondo para la Salud del Personal de las FF.AA. de la Nacional (Fonsafan) y no del Hospital Militar. Sin embargo, aseguró que ellos cumplen las mismas cargas horarias que los demás profesionales de la salud con contrato directo con el nosocomio.
Pese a ello, Fonsafan notificó a estos médicos y enfermeros que los mismos firmaron un contrato civil y no laboral, por lo cual no tienen derecho a percibir el aguinaldo debido a su condición de prestadores de servicios.
Acotó que el año pasado tuvieron el mismo problema, pero que tras denuncias a la prensa lograron cobrar el décimotercer sueldo.
Ahora pocos se animan a elevar su voz de protesta ya que, en 2013, uno de los afectados de la problemática fue desvinculado del hospital por dar a conocer el inconveniente a los medios de comunicación, según la denuncia.
Mencionó además que el personal de la unidad de terapia intensiva tampoco tiene derecho a salir de vacaciones.
Alegó que desconocían el tipo de contrato que firmaron en 2012, pues desde el nosocomio le dijeron que se trataba del mismo acuerdo que los anteriores.
“Presentamos denuncia ante el Ministerio de Justicia y a Fonsafan se le notificó de ello, pero no pasó nada. Si queremos cobrar nuestro aguinaldo, debemos poner abogado y denunciar”, lamentó el profesional.
El Cnel. Timoteo González, miembro del directorio del Fonsafan, indicó que los 21 médicos y enfermeros no pueden pedir aguinaldo porque firmaron un contrato civil, por lo cual el Código Laboral no los afecta.
“El contrato con ellos es en el ámbito civil, no laboral. En el contrato se especifica que no pueden pedir otros pagos fuera de ese contrato, según nos dicen los juristas”, argumentó el militar, en conversación con ABC Color.
Relató que años atrás el Hospital Militar sufrió un recorte presupuestario, por lo cual no contaba con fondos para mantener al personal de la unidad de Terapia Intensiva. Para evitar cerrar dicha unidad, Fonsafan se hizo cargo del pago del salario de los médicos y enfermeros.
“Nos ocupamos de una carga que no es nuestra. Mensualmente el pago de estos salarios nos cuesta G. 100 millones”, afirmó González.
Explicó que el dinero de Fonsafan debe ser destinado a la ayuda a pacientes que no cuentan con suficientes recursos para la compra de medicamentos o la realización de estudios que el Hospital Militar carezca.
El artículo 243 del Código Laboral señala que “queda establecida una remuneración anual complementaria o aguinaldo, equivalente a la doceava parte de las remuneraciones devengadas durante el año calendario a favor del trabajador en todo concepto (salario, horas extraordinarias, comisiones, u otras), la que será abonada antes del 31 de diciembre, o en el momento en que termine la relación laboral si ello ocurre antes de esa época del año”.