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El menor de 12 años a quien su madre derramó agua hirviendo en la espalda fue dado de alta ayer y se encuentra fuera de peligro, puesto que sus quemaduras no revisten gravedad, según informó la fiscala interviniente, Claudia Torres. El expediente califica el hecho, de manera primaria, como violación al deber del cuidado.
“Aparentemente, según la vecina que socorrió ayer al niño, este hecho solo fue la gota que colmó el vaso, pues siempre escuchaban gritos, llantos y maltratos”, detalló en contacto con ABC Cardinal. El menor fue trasladado a la casa de la abuela, luego de una orden de la jueza de la Niñez que intervino en el caso.
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La madre declarará hoy en presencia de un defensor público y también este día se tendrá el diagnóstico médico del niño. También los vecinos y el padrastro serán interrogados. El hecho ocurrió en Mariano Roque Alonso.