“Maestros son víctimas de roedores del Estado”, afirman

SAN JUAN BAUTISTA, Misiones. La presidenta del gremio docente de esta ciudad Corina Falcón señaló que los maestros siguen siendo víctimas de acuerdos y componendas internacionales y “de roedores de la administración del Estado”.

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Corina Falcón, presidenta de la Asociación de Educadores Rurales Sanjuaninos (AERS) calificó a la política del Gobierno de Horacio Cartes de “capitalismo salvaje”. Manifestó su preocupación por el anunciado veto presidencial a la ley del sistema jubilatorio.

Según la presidenta de la AERS, existiría un preacuerdo entre Cartes con el Banco Mundial para ofrecer mano de obra barata y pretender unificar el sistema de jubilación de los trabajadores de la educación con los demás obreros.

La dirigente sindical señaló que el trabajo del docente en cualquier otro país del mundo es diferenciado: “Hasta en la época de la dictadura ha sido diferenciado, tomando en consideración el desgaste psicológico, físico y fisiológico del maestro”, apuntó Falcón.

Añadió que el desgaste intelectual del docente deja secuelas, “de modo que si pretenden equiparar el sistema de jubilación, primero este Gobierno debe crear más asilo por distrito y preparar más especialistas en neurología, psiquiatras y psicólogos”, advirtió.

“Necesitamos que Cartes prepare más especialistas, porque ese tipo de regalo nos ofrece este Gobierno. Ese es el futuro que nos prepara su Gobierno”, expresó.

Señaló que con la promulgación de la Ley Nº 2.345 se ha violado el principio de la no retroactividad de la normativa. “Es decir a partir de la vigencia de la ley 2345 debieron jubilarse aquellos que después de la promulgación entraron en la docencia”, apuntó.

“Sin embargo ya Nicanor Duarte Frutos y Blanca Ovelar con previo acuerdo con el Banco Mundial, a rajatabla resolvieron reducir el derecho del trabajador docente”, dijo Corina Falcón.

Agregó que hay un principio constitucional que dice que el beneficio del trabajador no puede ser reducido. “Es más, una de las leyes para la administración de la caja de jubilaciones establece que el trabajador es el que tiene que administrar la caja de jubilaciones”.

Señaló que en forma llamativa el supuesto aporte a la caja de jubilaciones fue a parar en el Banco Central. “Esa caja nosotros debimos administrar”, dijo.

Subrayó que puede pasar que solo en papeles los funcionarios hayan aportado, “así como nos acostumbraron siempre los roedores de la administración del Estado a que el aporte al Instituto de Previsión social (IPS) nunca lleque.

“Somos doble y triplemente víctimas de estos parlamentarios que dicen ser representantes del pueblo, sin embargo, cada día más nos tienen más empobrecidos, marginados y maltratados”, apuntó Falcón.

Cuestionó elevar los años para el trabajador de la educación seria la locura total. Agregó que el gremio buscó reparar los daños que causaron los gobiernos de turno, al tiempo de mencionar a Nicanor Duarte Frutos y a la ex ministra de educación Blanca Ovelar.

Corina Falcón habló de un compromiso del expresidente Nicanor Duarte Frutos y de la actual senadora Blanca Ovelar de restituir los derechos adquiridos a los maestros. “Esta ley era para reactivar la caja fiscal por el término de 10 años”, dijo.

Añadió que según la promesa en 10 años se iba a reparar el daño que podría causar. Es más, siempre el Estado restituye al trabajador que se jubila, signifca que no se quebranta la caja. Se sigue aportando porque nueva gente entra en reemplazo del jubilado.

Sostuvo que en el informe de recaudación de la caja fiscal, en el 2012/2013 y marzo del 2014 existe superávit. De modo que es mentira que se quebranta la caja fiscal, manifestó Corina Falcón.

La presidenta de la AERS cuestionó también a las autoridades de Hacienda y al gobierno de Cartes que no “hayan levantado un dedo”, ante un eventual déficit de la caja fiscal de los policías y de los militares.

Con relación a la discriminación de la ley del sistema de jubilación sostuvo que el mismo Congreso Nacional tiene que corregir y reparar el daño. Es una responsabilidad o una irresponsabilidad de los parlamentarios que no tienen el mínimo criterio para actuar con independencia y están sujetos a lo que diga Cartes, concluyó.

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