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El fiscal Gerardo Mosqueira y su comitiva lograron ingresar en la habitación Nº 24 del motel “Cascada” con orden de allanamiento y aprehendieron allí a las dos personas que estaban escondidas de la Policía.
Los detenidos fueron identificados como David Tomás Demestri Leguizamón (24), paraguayo, estudiante del primer año de Derecho, y Montserrat María Kelser Centurión (27), paraguaya, de acuerdo con datos de la Policía.
El agente del Ministerio Público anunció la imputación y solicitará la prisión preventiva de ambos.
Demestri Leguizamón es la identidad de una de las personas que el 9 de agosto de 2015 estuvieron involucradas en una balacera con policías durante una persecución que se extendió por tres ciudades.
En aquella ocasión, Demestri y otro sujeto, identificado como Javier García, fueron detenidos tras atropellar la barrera policial y protagonizar un intento de fuga. En el vehículo que conducían ambos se encontró varias armas de fuego.
Sin embargo, en contacto con ABC Color, Pedro Demestri, hermano del ahora detenido, dijo que los delincuentes en aquella ocasión presentaron la cédula que se le había extraviado a este. "No hacía falta pericia alguna porque evidentemente la persona que figuraba en la cédula no se parecía en nada al detenido", expresó, para resaltar que, por esa razón, su hermano no tiene antecedentes penales.
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El incidente se había producido cerca de la 1:30 de esta madrugada sobre la avenida Mariscal López, San Lorenzo, donde un grupo de agentes de la Patrulla montaba una barrera de control. El conductor del vehículo Hyundai Atos, chapa EAD 255, quien estaba acompañado de una mujer, atropelló al inspector Ángel Vargas (22), quien le había pedido detener la marcha para el control de rutina. El uniformado está hospitalizado, fuera de peligro.
Tras ello, otro inspector, a bordo de una motocicleta, lo persiguió para detenerlo; sin embargo, el conductor incluso intentó chocarlo durante la huida, según la Policía.
Para evitar ser capturado, ingresó en el motel “Cascada”, ubicado sobre la calles Víctor Cáceres y Virgen del Rosario, también en San Lorenzo, donde permaneció encerrado por unas 10 horas. Fuera del edificio se encontraban agentes de la Caminera, de la Policía Nacional y de Fiscalía aguardando la orden de allanamiento, que fue firmada por el juez Víctor Fernández Cáceres.