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Médicos del Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu, familiares y el propio ministro de Salud participaron hoy de una conferencia en que informaron de la favorable evolución de Liz, quien finalmente fue dada de alta hoy. La niña saldrá del hospital al mediodía y vivirá en una casa en San Lorenzo, que fue prestada a su familia por personas de buena voluntad. Participaron además Elvira Montiel (14), adolescente que también fue trasplantada este mes pero que ya fue dada de alta hace algunos días, y la pequeña Liz Ávalos (9), quien fuera la primera niña trasplantada en un sistema público en Paraguay. Ambas siguen acudiendo al Hospital Pediátrico para sus controles de rutina.
Liz tuvo que pasar por mucho para finalmente conseguir el corazón a fin de poder seguir viviendo. La niña es la menor de nueve hermanos y vive con sus padres en una precaria casa en Curuguaty, ubicada a 251 kilómetros de Asunción. Su padre se dedica al trabajo en la chacra, pero esto no es suficiente para vivir y mucho menos para sobrellevar una enfermedad compleja como la que tenía Liz. A todo este escenario se suma el hecho de que uno de sus hermanos ya había fallecido por una enfermedad cardíaca congénita, recordó el médico Marcos Melgarejo, uno de los responsables de su tratamiento.
Liz tenía una cardiopatía grave congénita denominada “anomalía de Ebstein”, que obligó su familia a trasladarse de Curuguaty hasta la ciudad, donde fueron tratados en el Hospital de Clínicas de San Lorenzo. Luego, fueron a Buenos Aires, hasta el Hospital Garraham, famoso por tratar casos cardíacos. Allí, le recomendaron someterse a un trasplante por la gravedad de su caso. Sin embargo, no pudo ingresar a la lista de espera en el país vecino, ya que esta era sumamente larga, y priorizaban a los argentinos. Los médicos extranjeros le indicaron ir en Paraguay al Hospital Pediátrico “Niños de Acosta Ñu”.
El martes 12 de agosto, Liz llegó al hospital y quedó internada para realizarse algunos estudios. Los médicos rápidamente la agregaron a la lista de espera del Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT) para conseguir un corazón. Tan solo tres días después, apareció una familia que donó un corazón para Liz. Comprobaron la compatibilidad del órgano con su cuerpo y el viernes 15 de agosto entró en el quirófano.
Eran las 18:00 cuando se inició la operación. Los médicos salieron de la sala a la medianoche, con la buena noticia de que el procedimiento fue exitoso. Era ya el 16 de agosto, “Día del Niño” en Paraguay, celebración que se conmemora entregando regalos a los niños. Liz definitivamente recibió el mejor de todos.
La aparición rápida del corazón para Liz demuestra que cada vez hay más voluntad y solidaridad para la donación en nuestro país. De hecho, según datos del INAT, en los últimos cinco años ha habido más donaciones de órganos en comparación con épocas anteriores.