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De esa manera, la Cámara de Apelaciones accedió al pedido de la defensa del comisario principal Zárate, que había solicitado el arresto domiciliario hasta la realización del juicio oral y público, que está marcado para el 4 de junio de 2018.
No obstante, el otro procesado por el caso y supuesto autor del disparo, el suboficial 1º Jhonie Osvaldo Orihuela Chávez, continuará recluido en la repartición policial.
“Cayó como un balde de agua fría, es muy difícil, realmente”, indicó Richard Pereira (padre) tras conocer la noticia de la liberación del comisario. “No es el tiempo que debería estar en su casa, mi hijo va a seguir en silla de rueda y el ya está en su casa”, lamentó.
“Me parece tan injusto, tendría que estar dedicándome a mi hijo y no estar pendiente de la justicia”, indicó, para luego agregar que el exjefe de la comisaría, a su criterio, es “cómplice” del policía que jaló el gatillo, ya que estuvo al tanto del procedimiento e intentaron encubrir el caso alegando que su hijo tenía droga y quiso resistirse.
Pese a esto, dijo tener esperanza de que alguna vez va a llegar la justicia y que por lo menos los involucrados en el cargo pierdan sus beneficios, que son pagados por la ciudadanía.