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Se encuentra sobre la calle Oliva casi Montevideo, en pleno centro de Asunción, hoy en día está casi en ruinas, pero décadas atrás fue una de las más bellas edificaciones de nuestra ciudad capital, la llamada “Casa del Horror”.
Ahora, al pasar por allí nadie puede evitar pensar en las cinco personas que fueron asesinadas y enterradas allí hace al menos una semana; toda una familia entera, incluso dos niños pequeños, víctimas de lo que se conoce como "feminicidio vinculado".
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Sin embargo, pocos saben que esa edificación guarda otra historia paralela, menos trágica y más significativa. Antiguamente perteneció al distinguido Dr. Mario Luis De Finis, destacado médico, docente e investigador. Nació en Pilar, Ñeembucú, el 21 de marzo de 1900.
De Finis fue director del Laboratorio Central del Hospital de Clínicas, decano de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Asunción, además de vicerrector y uno de los fundadores de la Universidad Católica. Se dedicó a la investigación científica y a la docencia durante 35 años.
Además, también tuvo una admirable actuación durante la Guerra del Chaco y tuvo innumerables reconocimientos nacionales e internacionales, entre los más resaltantes se encuentran la distinción de la Orden Pontificia de San Gregorio Magno, que recibió en dos ocasiones, por los papas Pío XII y Pablo VI.
Realizó cursos de especialización y ocupó importantes cargos académicos, parlamentarios, municipales, culturales. También escribió y publicó numerosas investigaciones, en variados idiomas.
A inicios de los años 1960 la casona también fue oficina de la Liga Paraguaya de Fútbol, según el arquitecto Eduardo Alfaro Riera. La edificación fue diseñada en noviembre de 1935 por Miguel Ángel Alfaro, uno de los arquitectos más reconocidos de nuestro país, autor del atrio de la Virgen del Panteón de los Héroes, la Escalinata de Antequera y la Basílica de Caacupé, entre otras obras destacadas.
Este punto sin embargo, es discutido por el historiador deportivo Pedro García Garozzo. "No es correcto que albergó a la Liga Paraguaya. El doctor De Finis (que murió pobre y cuya viuda vivió en sus ultimos años ayudadas por Damas de Caridad que le consiguieron una habitación en el local del Instituto de idiomas ANGLO) era un hombre pudiente. Una casa de De Finis pasó luego a ser propiedad de la La Liga Paraguaya de Futbol, que funcionó un tiempo allí, antes de mudarse a 25 de Mayo y Tacuari (su penultimo local). Esa otra propiedad del Dr. De Finis está ubicada en la calle Presidente Franco, donde está hasta hoy una importante dependencia de la Policia Nacional. A instancias de ella, justamente, se hizo un truque - La Policia pasó a ocupar esa casa - por su ubicacion estratégica en materia de seguridad - y le dio a cambio la propiedad de 25 de Mayo y Tacuary a la Liga no en venta sino en acuerdo de trueque de alquileres", escribió García.
Alfaro, nieto de Miguel Ángel, destacó que fueron muchas las obras arquitectónicas que aportó su abuelo para nuestro país y sobre todo la capital, incluso fue el fundador de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de Asunción.
“Fue uno de los mejores arquitectos del Paraguay, que vino empapado del Renacimiento de Italia”, aseguró orgulloso.
