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El intendente Fernando Negrete se refirió al último informe de la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) en el cual se recomienda evitar el uso recreativo del lago Ypacaraí.
Esta postura contradice a la de las autoridades de la Gobernación de Central, quienes anunciaron la habilitación de las playas en Areguá.
“Las cianobacterias siempre existieron y todos los estudios hechos antes del 2012,( año en que se declaró oficialmente la presencia de algas tóxicas) nunca se dieron a conocer”, manifestó.
Indicó que “siempre recibíamos los informes de coliformes fecales y la explosión de cianobacterias”.
Aseguró que en años anteriores habían advertido sobre la situación crítica del lago. “Esta catástrofe se veía venir”, refirió, en contacto con la 780 AM.
“Desde el 2011 veníamos advirtiendo que se venía un desequilibrio en el Ypacaraí. Veníamos diciendo y planteando alternativas”, manifestó.
Indicó que la solución definitiva a este problema siempre fue la construcción de un alcantarillado sanitario y ello ya había sido recomendado hace varios años atrás.
“La solución es el alcantarillado. Es lo mismo que nos dijeron los japoneses hace 40 años”, señaló al lamentar la negligencia.
El jefe comunal comentó que pese a las advertencias, aún hay personas que deciden ingresar a las aguas contaminadas.
Aseguró que se instalan carteles y se informa a través de los medios de comunicación, pero finalmente “la gente hace lo que quiere”.
El uso recreativo del Ypacaraí permanece restringido desde setiembre de 2012, luego de que el Ministerio de Salud alertara sobre la presencia de “algas altamente tóxicas”.
A casi dos años de esta confirmación, aún no se iniciaron los trabajos de alcantarillado en el área de la cuenca del lago.